El Kremlin ha respondido este martes a la reciente amenaza del presidente estadounidense, Donald Trump, quien anunció que está reduciendo el plazo para establecer un alto el fuego en Ucrania de 50 a solo 10 días. Esta medida va acompañada de la advertencia de que, de no obtener resultados satisfactorios, comenzará a imponer aranceles del 100% a Rusia y a sus aliados comerciales.

Dimitri Peskov, portavoz del Kremlin, manifestó que han "tomado nota" de las declaraciones de Trump, mientras asegura que la "operación militar especial" sigue en marcha. Peskov reafirmó el compromiso de Rusia con un proceso que busque la paz y que asegure sus intereses en el conflicto ucraniano.

Además, el vocero del Kremlin evitó pronunciarse sobre la negativa de Trump a mantener un diálogo directo con el presidente ruso, Vladimir Putin. Este último había expresado su decepción el lunes por la postura del mandatario estadounidense respecto al proceso de paz. "Prefiero no emitir ningún juicio sobre el asunto", declaró Peskov.

Peskov finalizó reiterando que la administración rusa ha tomado nota de las declaraciones de Trump, como lo señaló en una rueda de prensa, según reportó la agencia Interfax.

A pesar de la creciente tensión, Peskov recordó que no se ha discutido ninguna reunión cara a cara entre los líderes en los encuentros recientes entre Washington y Moscú desde que Trump volvió a asumir la presidencia. "Este tema no ha formado parte de la agenda, y no lo estará", concluyó el portavoz.

El lunes, antes de una reunión privada con el primer ministro británico, Keir Starmer, Trump volvió a mostrar su frustración hacia Putin, acusándolo de seguir atacando ciudades en Ucrania.