En un nuevo revés para la ultraderecha en Austria, las conversaciones entre el Partido de la Libertad de Austria (FPO) y el Partido Popular Austriaco (OVP) han fracasado este miércoles. Las diferencias entre ambas formaciones, especialmente en temas de política exterior y reparto de carteras ministeriales, han sido insalvables.

Tras cuatro meses y medio de las elecciones parlamentarias, Austria continúa sin gobierno en una situación sin precedentes. El presidente del país, Alexander van der Bellen, había encargado a Herbert Kickl la formación de un nuevo gobierno, que hubiera marcado el primer canciller de extrema derecha en el país.

Sin embargo, Kickl ha informado al jefe de Estado austriaco sobre el fin de las negociaciones con los conservadores. Según informaciones del diario 'Die Presse', ha retirado su mandato para formar gobierno culpando al líder del OVP, Christian Stocker, por la imposibilidad de seguir adelante.

Por su parte, Stocker ha asegurado que el fracaso se debe a la actitud de Kickl, que solo busca poder y carece de un compromiso real. Las diferencias en política exterior, seguridad, Unión Europea y política migratoria han sido puntos clave en el bloqueo de las negociaciones para formar gobierno.

Van der Bellen tiene previsto dirigirse a la nación en un discurso que se llevará a cabo a las 18:30 horas locales desde la sede de la Presidencia. Parece que los partidos políticos tendrán un largo camino por recorrer para lograr finalmente la formación de un ejecutivo en Austria.