En un comunicado emitido por las autoridades rusas este martes, se ha informado sobre la liberación de una docena de localidades en la región de Kursk, que fue escenario de una audaz incursión por parte de las fuerzas ucranianas. Al principio de la operación, las tropas ucranianas llegaron a controlar más de 1000 kilómetros cuadrados de territorio ruso.
El comandante de las fuerzas especiales de Ajmat, Apti Alaudinov, ha destacado que en las últimas operaciones del Ejército ruso se han logrado infligir "pérdidas muy grandes" a las tropas ucranianas. Alaudinov afirmó ante la televisión rusa que las fuerzas ucranianas no tienen recursos para avanzar y están intentando conservar las zonas que ya han tomado, aunque ya han perdido doce asentamientos.
Hace unas semanas, el Ministerio de Defensa ruso anunció la recuperación de otros diez asentamientos tras intensificar las operaciones en la región. Sin embargo, en contraste, en las últimas horas, Ucrania ha declarado que ha logrado abrir una nueva vía de entrada a través de la frontera.
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