En la noche del 28 de octubre, el aclamado artista argentino Duki, cuyo nombre real es Mauro Ezequiel Lombardo Quiroga, vivió un momento culminante en su segundo recital en el Movistar Arena de Madrid, donde el público vibró al máximo. Las entradas para esta esperada presentación se agotaron rápidamente, reflejando la enorme demanda que genera su música.

Después de una primera actuación en el mismo recinto, Duki se prepara para cerrar su serie de conciertos en Madrid con una última función programada para mañana, sumando un total de casi 40,000 asistentes a lo largo de tres días. La atmósfera en el lugar estaba electrificada, y el artista entregó una experiencia musical que transportó a los fans a un mundo de pura adrenalina y pasión.

Pasadas las 21:00 horas, Duki apareció en un escenario ingeniosamente diseñado, evocando la calidez de un hogar a través de pantallas y una plataforma central. Las primeras canciones, como 'Nueva era', 'Brindis' y 'Buscarte lejos', provocaron un estallido de energía, haciendo que el público saltara y gritara con entusiasmo.

Con una conexión palpable con su audiencia, Duki expresó su agradecimiento: “Gracias a mis diablos y mis diablas que hacen posible este show. Ya son 7 años viniendo a España. Esto no sería posible sin ustedes, que se entregan en cada nota. Gracias por estar siempre a mi lado”, compartió antes de avanzar a la siguiente parte del evento.

La entrega del público alcanzó su clímax en la mitad del show, cuando canciones como 'Goteo', 'Malbec', y 'She don’t give a fo' elevaron la intensidad, provocando un delirio en el Movistar Arena. Este último tema, con más de 611 millones de reproducciones en Spotify, destacó la popularidad indiscutible del artista.

Las dos canciones finales, 'Givenchy' y 'Hello cotto', transformaron la pista en un torbellino de emociones, donde grupos de jóvenes se movían al ritmo de la música, creando una atmósfera caótica pero a la vez mágica.

El 'Ameri World Tour' de Duki ha recorrido únicamente cuatro ciudades en España, comenzando en Sevilla y culminando en Madrid. Cada una de sus presentaciones ha agotado las entradas, y el artista ha decidido donar una parte significativa de los ingresos para ayudar a los afectados por las recientes inundaciones en el país.