El Real Madrid y su afición rindieron un emotivo homenaje este sábado a Marcelo Vieira, el legendario lateral brasileño que anunció su retiro del fútbol profesional a los 36 años. El Bernabéu se vistió de gala para despedir a una de las leyendas del club, con un emotivo reconocimiento por parte de los madridistas.

Marcelo fue recibido por una ovación de pie al saltar al césped del estadio momentos antes del clásico contra el Atlético de Madrid. Vestido de negro, el brasileño agradeció con gestos de corazón los aplausos y cánticos de la grada, que reconoció su trayectoria y legado en el club.

Acompañado por sus hijos, Marcelo recibió una camiseta enmarcada firmada de manos de Luka Modric, el actual capitán del Real Madrid, con quien se fotografió junto al resto del equipo. Un emotivo momento que llenó de nostalgia a los presentes en el estadio.

El lateral brasileño, tras 16 temporadas y 25 títulos con el Real Madrid, anunció su retiro en un emotivo mensaje en redes sociales, donde expresó su amor por el fútbol y agradeció a su abuelo por apoyar su carrera desde el inicio. Marcelo se despidió del Madrid como un madridista más, recordando las noches mágicas en el Bernabéu.

Marcelo llegó al Real Madrid en 2007 procedente del Fluminense, y tras una exitosa trayectoria, se convirtió en una leyenda del club. Con la conquista de la Decimotercera y un total de 25 títulos en su palmarés, el brasileño deja un legado imborrable en la historia del equipo blanco.

Siempre querido por la exigente afición madridista, Marcelo supo ganarse el cariño de los aficionados incluso en sus últimas temporadas, donde tuvo menos protagonismo en el campo. Su fidelidad y alegría lo convirtieron en un ídolo dentro y fuera del terreno de juego, dejando una huella imborrable en el club.

A pesar de su deseo de renovar, el club optó por confiar en nuevos talentos y Marcelo aceptó su salida del equipo con gratitud y respeto. Así, se despide un ídolo del madridismo, un lateral legendario que marcó una era en el Real Madrid con su entrega y pasión por el juego.