El gobierno español se prepara para tomar medidas adicionales ante lo que considera un ataque contra las instituciones del país por parte del presidente de Argentina, Javier Milei. El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha afirmado que cuentan con diversas opciones para responder a esta crisis, aunque las herramientas tradicionales parecen no ser suficientes.

Desde que Milei insultara a la esposa del presidente Pedro Sánchez durante un acto de Vox, el gobierno ha tomado medidas contundentes, incluyendo la retirada permanente de la embajadora española en Argentina. Sin embargo, al seguir este camino se han agotado algunas de las opciones diplomáticas habituales, dejando como principales alternativas la expulsión del embajador argentino y la ruptura de relaciones.

Una de las acciones que podrían haberse ejecutado antes es la expulsión de algún diplomático de rango inferior de la Embajada argentina, como se ha hecho en casos anteriores con Rusia y Corea del Norte. Esta medida suele preceder a la expulsión del embajador y puede ser una señal de advertencia para evitar una respuesta recíproca por parte del país afectado.

El siguiente paso podría ser la expulsión del embajador argentino, lo cual llevaría a una respuesta de Argentina que en este caso no podría ser recíproca al no contar ya con una embajadora española en Buenos Aires. La ruptura de relaciones diplomáticas sería la medida más extrema, con el cierre de la Embajada y la suspensión de toda actividad de la misión española, aunque se considera una opción irracional en este momento.

Además, el gobierno analiza la visita prevista de Milei a Madrid en junio, donde se le entregará un premio. Aunque el mandatario argentino no tenía previsto reunirse con el Rey ni con Sánchez durante su estancia, el Gobierno permitió su llegada a la Base Aérea de Torrejón y le brindó protección policial, lo que podría ser otra oportunidad para manifestar su malestar.