El Inter de Milán ha conseguido una victoria crucial este miércoles al vencer 0-2 al Feyenoord en el encuentro de ida de los octavos de final de la Champions League. Con goles de Marcus Thuram y Lautaro Martínez, el equipo italiano se coloca en una posición favorable para avanzar a la siguiente fase, donde se enfrentarán al ganador de la eliminatoria entre Bayern Múnich y Bayer Leverkusen.

El partido en el estadio De Kuip comenzó con un intento decisivo por parte del Feyenoord, cuando Ibrahim Osman tuvo una clara oportunidad en el minuto 3, pero su disparo fue detenido de manera efectiva por el portero español Josep Martínez. A medida que avanzaba el juego, el equipo local comenzó a ceder terreno ante un Inter que parecía tomar el control, marcando el primer gol al minuto 38.

El tanto llegó tras una brillante jugada de Denzel Dumfries, quien, tras desbordar por la banda derecha, asistió a Nicolò Barella. Este último levantó un centro preciso al área donde Thuram se encontró bien posicionado, realizando un astuto remate con el pie derecho que sorprendió a la defensa rival.

Justo antes del descanso, Lautaro Martínez casi amplía la ventaja con un potente tiro desde la frontal del área, pero el portero del Feyenoord, Timon Wellenreuther, demostró su habilidad al despejar el balón a córner. Sin embargo, no fue sino hasta el minuto 50 cuando Lautaro se desquitó, iniciando otra jugada destacada que culminaría en el segundo gol del Inter.

Desde tres cuartos de campo, el talentoso delantero argentino envió un pase al izquierdo a Alessandro Bastoni, quien eludió a un defensor antes de pasar a Piotr Zielinski. Aunque su primer disparo fue bloqueado por la defensa, Zielinski tuvo la claridad para asistir nuevamente a Lautaro, quien selló el 0-2 con un tiro potente y preciso que se coló casi en la escuadra.

El Inter tuvo la oportunidad de ampliar aún más su ventaja cuando Zielinski falló un penalti en el minuto 65, ya que el guardameta Wellenreuther adivinó la dirección y logró detener el tiro. A pesar de ese revés, el equipo dirigido por Simone Inzaghi se mostró seguro y sin complicaciones hasta el final, preparando el terreno para asegurar su pase a cuartos de final en el encuentro de vuelta el 11 de marzo en el Estadio Giuseppe Meazza, ante su afición.