El Gobierno de Argentina ha rechazado la existencia de un problema diplomático con España, argumentando que se trata de un tema personal entre el presidente argentino, Javier Milei, y el español, Pedro Sánchez. El portavoz de Milei, Manuel Adorni, ha declarado que es el Gobierno español quien debe disculparse por la "catarata de insultos" vertida por miembros de su gabinete.

En una rueda de prensa, Adorni expresó su sorpresa por la escalada de tensiones, señalando que el origen de la controversia fueron los insultos provenientes del Gobierno español. Destacó que Milei simplemente defendió los valores de Occidente en un discurso, y cuestionó la reacción del Gobierno de Sánchez.

Adorni manifestó su desconcierto ante las amenazas del ministro de Asuntos Exteriores español y aseguró que Milei no mencionó a ninguna persona en particular en su discurso. Subrayó que el conflicto no afecta las relaciones diplomáticas entre ambos países, a pesar de que se convocaron a los embajadores a consultas.

El portavoz confía en que las tensiones se puedan resolver una vez pasadas las elecciones europeas y dejó claro que Milei no planea llamar a Sánchez; por el contrario, instó al presidente español a pedir disculpas públicamente. Adorni descartó que el conflicto afecte las inversiones españolas en Argentina y mostró respeto por las opiniones de empresarios que criticaron el discurso de Milei como personales.