En un contexto en el que la desigualdad y la crisis climática siguen creciendo, la empresa Iberdrola ha anunciado un beneficio neto de 2.760 millones de euros en el primer trimestre del año, un aumento del 85,8% respecto al mismo período del año pasado. Este incremento se vio impulsado por las plusvalías millonarias generadas por la venta de activos en México, según informó la compañía.

La operación de venta de activos en México, que se cerró a finales de febrero, aportó 1.165 millones de euros al beneficio neto de la empresa. Además, en 2023, Iberdrola vio un impacto positivo de 238 millones de euros por la recuperación del déficit en el negocio comercial del Reino Unido. Excluyendo estos factores, el beneficio neto de la empresa creció un 28%.

El Ebitda de Iberdrola alcanzó los 5.857 millones de euros en el primer trimestre, un incremento del 44,1% en comparación con el año pasado. Si se excluyen las ganancias de México y la recuperación del déficit en el Reino Unido, el Ebitda creció un 10%, llegando a los 4.140 millones de euros gracias a mejoras en los márgenes y a un récord de producción renovable en los últimos 10 años en Iberia.

La cifra de negocios del grupo en el primer trimestre fue de 12.678,5 millones de euros, mostrando una caída del 18% en comparación con el mismo período del año anterior.

Las inversiones brutas de Iberdrola en el trimestre alcanzaron los 2.382 millones de euros, un aumento del 36%. El negocio de redes creció un 27%, llegando a los 1.213 millones de euros, debido principalmente a los nuevos 'rate cases' en diferentes países. En cuanto al negocio Renovable, la inversión aumentó más de un 50%, destacando los 994 millones de euros destinados a la energía eólica marina.

Iberdrola también reportó una mejora significativa en la generación de caja, con una entrada de aproximadamente 5.400 millones de euros en el primer trimestre procedentes de la transacción en México.

El flujo de caja operativo de la compañía creció un 5%, llegando a los 3.145 millones de euros, un 14% si se excluye el impacto del déficit de tarifa del Reino Unido registrado el año pasado. La deuda financiera neta ajustada de Iberdrola se situó en 44.998 millones de euros al cierre de marzo, mostrando una disminución del 5,9% respecto a diciembre del año anterior gracias al cobro por la venta de México.