En un nuevo giro de la escalada de tensión en Cisjordania, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) junto con el Shin Bet, la agencia de inteligencia israelí, han llevado a cabo una operación militar en la que se reporta la muerte de tres palestinos, a quienes se califica de "terroristas". Esta acción se desarrolló en la gobernación de Yenín, en el norte del territorio palestino, el pasado martes.

Según un comunicado emitido por los portavoces del Ejército israelí y el Shin Bet, la operación tuvo lugar en la aldea de Qud, donde se buscaba arrestar a supuestos miembros de una organización terrorista activa en el campamento de Yenín. La acción fue coordinada por el Shin Bet y contó con la colaboración de los combatientes de las FDI y la unidad policial antiterrorista Yamim.

Durante la intervención, se indicó que francotiradores de la unidad Yamim detectaron a un grupo de individuos dentro de una cueva y abrieron fuego, resultando en la muerte de dos de ellos y la herida de otro. Posteriormente, la Fuerza Aérea israelí, siguiendo las instrucciones del Shin Bet, se encargó de eliminar al tercer presunto terrorista.

De acuerdo con informes del medio palestino PalInfo, los operativos israelíes rodearon previamente un hogar en Kafr Qud, en la parte occidental de Yenín, lo que dio lugar a una serie de disparos y explosiones. Más tarde, excavadoras y vehículos militares llegaron al lugar, evidenciando la magnitud de la operación.

Este ataque se produce en medio de un clima de creciente violencia, ya que solo un día antes, un joven palestino fue abatido en la ciudad de Hebrón. La ONU ha señalado que desde el 7 de octubre de 2023, más de mil palestinos han perdido la vida en Cisjordania, en un contexto de represalias atribuidas a las FDI y a colonos extremistas, tras los ataques lanzados por el grupo Hamas y otras facciones palestinas contra Israel.

La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos ha resaltado que el número de palestinos muertos, que incluye a 213 menores, representa el 43 por ciento de todas las víctimas palestinas en Cisjordania a manos de las tropas israelíes y colonos en los últimos 20 años. Esta alarmante cifra ilustra el incremento de la violencia que se había intensificado incluso antes del inicio del conflicto en octubre.