BRUSELAS, 22 de octubre. La Unión Europea ha elevado su crítica hacia Rusia, señalando la falta de interés de este país por poner fin al conflicto en Ucrania. A pesar de los intentos del presidente estadounidense, Donald Trump, por facilitar un alto el fuego, el Kremlin permanece anclado en su postura bélica, según las autoridades europeas.

Anitta Hipper, portavoz de la política exterior de la UE, subrayó en una conferencia de prensa que mientras Ucrania, Europa y Estados Unidos abogan por la paz, el discurso ruso sigue alimentando la guerra. "Valoran la iniciativa de Trump para encontrar una solución, pero las acciones de Rusia son claramente de confrontación", afirmó Hipper.

La portavoz también hizo eco de los recientes ataques rusos en territorio ucraniano, donde bombardeos indiscriminados han cobrado la vida de al menos seis civíles, incluidos dos niños en la región de Kiev. "Putin ha optado por atacar a los más vulnerables, y los recientes bombardeos de guarderías son un claro indicativo de la brutalidad de su campaña", denunció, enfatizando que la UE mantendrá su apoyo militar y financiero a Ucrania en su lucha por la soberanía.

Este revuelo se produce en un contexto de incertidumbre sobre la reunión entre Trump y Putin, inicialmente anunciada en Budapest, pero que ha perdido fuerza debido a la intransigencia de Rusia en su postura sobre el conflicto. La Casa Blanca ha dejado claro que no se vislumbra un encuentro inminente ante la falta de avances por parte de Moscú.

Desde Hungría, el primer ministro Viktor Orbán ha manifestado que su país sigue adelante con los preparativos para una "cumbre de paz" entre ambos líderes, aunque ha admitido que permanece abierta la cuestión de la fecha exacta del encuentro. La expectativa de Orbán contrasta con la desconfianza abierta que han mostrado tanto Rusia como Estados Unidos en declaraciones recientes. La Casa Blanca ha reiterado que no habrá una reunión programada a corto plazo y Trump se ha mostrado poco claro al respecto, generando más dudas en el ambiente.