El panorama político en Ecuador se transforma con la elección de Rodrigo Paz como nuevo presidente, quien ha manifestado este lunes su deseo de restablecer las relaciones diplomáticas con Estados Unidos, tras 17 años de distanciamiento que han caracterizado a los gobiernos del Movimiento Al Socialismo (MAS).

Durante su primera rueda de prensa celebrada tras la segunda vuelta electoral, Paz expresó su compromiso de reiniciar la colaboración entre ambas naciones, enfatizando que este nuevo vínculo debe enfocarse en combatir lo que él considera fuera del marco legal. “La relación con Estados Unidos se va a retomar, y es fundamental cooperar en temas que impactan a nuestros pueblos”, subrayó el presidente electo.

Con la mirada puesta en el futuro, el nuevo líder ecuatoriano aspira a posicionar al país en el contexto internacional, señalando que los últimos 20 años bajo la administración del MAS han sido un “absoluto fracaso”. “Estoy convencido de que lograremos establecer una relación fluida que genere beneficios mutuos y compromisos de trabajo conjunto”, agregó.

La respuesta internacional no se ha hecho esperar. En la noche del domingo, el secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, felicitó a Paz y abrió la puerta a una nueva etapa de colaboración bilateral, centrada en intereses estratégicos comunes. Otras naciones de la región, como Perú, Brasil, Argentina, Paraguay y Chile, también se unieron a las congratulaciones por su victoria.