La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) ha denunciado este lunes "importantes daños" materiales provocados por los ataques de la Armada de Israel contra una de sus instalaciones en la ciudad de Rafá, en la Franja de Gaza. Se ha informado que el personal internacional de la ONU había abandonado el edificio antes del ataque y que no hay informes de víctimas entre los trabajadores, aunque el edificio quedó gravemente dañado debido a los impactos directos.

El comisionado general de la UNRWA, Philippe Lazzarini, ha declarado que "este reciente ataque es una muestra más de que ningún lugar de Gaza es seguro. El desprecio por la protección de las infraestructuras civiles es testimonio del nivel de horror que los civiles de Gaza viven cada día". Lazzarini también ha destacado que más de 60 instalaciones de la UNRWA han sufrido daños en el marco de las hostilidades, y ha reiterado la importancia de proteger estos lugares que acogen a más de 778.000 desplazados.

La UNRWA ha compartido las coordenadas de sus instalaciones con las partes en conflicto, incluyendo las correspondientes al alojamiento del personal internacional, en un intento de evitar ataques. Sin embargo, el 70 por ciento de las instalaciones dañadas se encontraban en las zonas centro y sur de Gaza, que supuestamente eran consideradas "zonas seguras" por el Ejército de Israel.

La UNRWA ha denunciado que 101 trabajadores del organismo han muerto en ataques de Israel desde el inicio de las hostilidades, y un tercio de ellos han perdido la vida en ataques al sur de Gaza. Mientras tanto, las autoridades de Gaza, controladas por Hamás, han registrado más de 11.000 muertos, miles de desaparecidos y millones de desplazados debido a los ataques israelíes.