En el marco de una emotiva recepción en Madrid, el director técnico del equipo femenino de baloncesto español, Miguel Méndez, ha expresado su satisfacción por la destacada actuación en el Eurobasket, subrayando que el logro de alcanzar la medalla de plata trasciende el simple valor del metal. Según Méndez, la esencia del equipo radica en su actitud, su cohesión y el futuro prometedor que se atisba en el horizonte.

El entrenador, con una vasta trayectoria en el baloncesto femenino y numerosos títulos a su nombre, no ha escatimado en elogios hacia su equipo: "Lo que han hecho es dignamente sobresaliente. Aunque el oro habría añadido una estrella más a esta hazaña, el verdadero éxito está en la evolución y el trabajo que hemos realizado juntos". Estas declaraciones fueron un reflejo del orgullo que siente por el equipo que ha logrado construir.

Méndez también destacó que hay aspectos que van más allá de la victoria. "Ganar es fundamental, sin duda, pero hay valores que son aún más significativos que el resultado en el marcador. Lo que realmente importa es la identidad que está tomando este equipo, la filosofía que estamos sembrando y la energía colectiva que estamos cultivando", afirmó con convicción.

El entrenador gallego mostró su orgullo hacia cada uno de sus jugadores, reconociendo la importancia del trabajo en equipo para mantener una dinámica positiva a lo largo del torneo. "El éxito del equipo no se mide solo con los nombres que están en la lista, sino con el compromiso de todas las 21 jugadoras que han pasado por este proceso. Lo que hemos creado es un grupo fuerte y cohesionado que promete grandes cosas para el futuro", señaló.

Al mirar hacia adelante, Méndez reveló su intención de ampliar el grupo de seleccionadas, considerando la posibilidad de contar con 25 o incluso 30 jugadoras integradas en función de la temporada y las necesidades del equipo. Él muy claramente señala que, aunque su figura sea la más visible, el verdadero valor radica en el modelo de trabajo colectivo que implica una gran cantidad de talento detrás del escenario.

El técnico también reflexionó sobre su papel como entrenador de la selección, describiéndolo como una experiencia temporal y única. "Ser parte de este equipo es un regalo. Con el tiempo, podremos arrebatarle a otros el protagonismo, así que lo que queremos es dejar una huella duradera en la mentalidad y la estructura del equipo".

Asimismo, Méndez subrayó la importancia de la juventud en el equipo, elogiando la valentía y determinación de las jugadoras más jóvenes, quienes han influido notablemente en el rendimiento. "El reconocimiento a su trabajo es vital, y saber que confían en el trabajo que ofrecemos es un gran impulso", afirmó con entusiasmo.

Finalmente, en comparación con la plata lograda hace dos años, el entrenador notó un cambio en las sensaciones y en el desarrollo del equipo. "Este momento es una etapa de construcción, un nuevo ciclo con chicas jóvenes llenas de ganas, y la experiencia de las veteranas se ha convertido en un pilar fundamental tanto dentro como fuera de la cancha", concluyó Méndez, vislumbrando un futuro brillante para el baloncesto femenino español.