En una conmovedora ceremonia celebrada el 27 de octubre de 2023 en Madrid, la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM) rindió homenaje a la memoria de Fernando Fernández Tapias, quien falleció hace dos años. El acto conmemorativo coincidió con el 40º aniversario de su gestión al frente de la organización, y estuvo acompañado por la presencia de su viuda, Nuria González, así como de sus hijos menores, Iván y Alma. Entre los asistentes se encontraban también figuras destacadas del ámbito empresarial, incluido el actual presidente de CEIM, Miguel Garrido, junto a otros referentes como Antonio Garamendi y Jesús Ortiz.

El evento fue un auténtico tributo a la figura de Fefé, quien dirigió la CEIM durante 17 años, desde 1985 hasta 2002, convirtiendo a la entidad en un símbolo de libertad y democracia para los empresarios de la Comunidad de Madrid. Iván y Alma, que se mostraron visiblemente emocionados, no pudieron contener las lágrimas al escuchar los relatos sobre el impacto que su padre tuvo en el mundo empresarial. A su lado, Nuria demostró una gran fortaleza mientras consolaba a su hija, quien parecía especialmente afectada por el emotivo homenaje.

Durante una entrevista con Europa Press, Nuria compartió su profunda gratitud hacia CEIM y su presidente: “Estoy muy emocionada. Agradezco enormemente este homenaje a Fernando y a todos los que han compartido tan bellas palabras sobre su vida y legado. Me siento muy orgullosa de que mis hijos hayan podido ser parte de este recuerdo, algo que aunque vivieron de pequeños, es valioso volver a escuchar”.

Con la voz entrecortada, Nuria expresó: “Lo echamos mucho de menos, y este homenaje ha sido realmente hermoso. He tenido la suerte de compartir tantos años en este mundo empresarial a su lado. Aprendí mucho de él y siempre lo consideraré un ser excepcional”. Refiriéndose a su familia, argumentó cómo “Fernando siempre vivirá en nuestros corazones y sus enseñanzas dejarán una huella en sus hijos, quienes se sienten profundamente orgullosos de tenerlo como padre”.

La emotiva viuda recordó que “aunque físicamente ya no está con nosotros, sigue presente en espíritu, y algún día estaremos todos reunidos de nuevo”. A pesar del dolor de su ausencia, Nuria comparte que el tiempo le ha brindado consuelo y que sus hijos son el legado más hermoso que dejó su amado esposo: “Estoy agradecida por tener a Iván y Alma, son mi mayor fortuna”.

Finalizando su discurso, subrayó la importancia de su círculo familiar y amistoso. “He tenido la fortuna de contar con una gran familia y amigos, tanto de Fernando como de los míos. Ahora somos un gran apoyo mutuo y eso me llena de esperanza”, concluyó con lágrimas en los ojos, recordando la vida y legado de un hombre que ha dejado una huella imborrable en sus seres queridos.