En Madrid, el 29 de noviembre, el entrenador del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone, se mostró firme en su convicción de que su equipo no necesita compararse con nadie. En una conferencia de prensa previa al partido de este sábado contra el Valladolid, enfatizó que su enfoque está centrado en la autoevaluación y el crecimiento continuo de su plantilla. "Nos dedicamos a mirarnos a nosotros mismos y a crecer como equipo día a día", subrayó Simeone, dejando clara su intención de no distraerse con los desempeños de sus mayores rivales en LaLiga, el FC Barcelona y el Real Madrid.

Simeone, que expresó su satisfacción por la buena racha del equipo, que ha logrado seis victorias consecutivas, no se confía ante el desafío que representa el Valladolid. Destacó la intensidad del equipo rival, alertando que "el Valladolid tiene una intensidad importante, seguramente mucho más que los rivales que hemos enfrentado últimamente”. El entrenador argentino advirtió que su equipo necesitará estar a la altura para controlar el juego y capitalizar las oportunidades que se presenten.

El técnico, que ha sabido mantener la moral alta, elogió la competitividad del Valladolid al mencionar que en sus últimos encuentros han mostrado un gran espíritu de lucha. "No me imagino otro escenario que no sea verlo competir con la misma intensidad que mostró contra equipos como el Athletic Club o el Villarreal”, agregó, reconociendo la necesidad de igualar ese nivel de energía en el próximo encuentro.

A pesar de estar en un buen momento de forma, Simeone también reconoció que hay áreas que requieren atención y mejora. Afirmó que hay margen para la mejora defensiva, refiriéndose a la necesidad de mayor concentración en ciertas jugadas. En el aspecto ofensivo, destacó el potencial de su equipo, mencionando que la confianza y la estabilidad son cruciales para que cada jugador encuentre su mejor versión en el campo.

Al hablar sobre la situación del equipo, Simeone aseguró que es esencial no caer en extremos que puedan ser perjudiciales. Reconoció que la crítica es natural en el deporte, especialmente durante los momentos difíciles, pero también recordó que el manejo de esos altibajos es clave para alcanzar los resultados deseados a lo largo de la temporada.

El estratega no escatimó en elogios hacia Julián Álvarez, quien brilló con un doblete en el partido de Liga de Campeones en Praga, destacando su nobleza y la forma en que su calidad se eleva en momentos clave. “Está encontrando el camino que seguramente busca”, afirmó Simeone en referencia al crecimiento del delantero.

Asimismo, el regreso de Marcos Llorente tras su lesión fue motivo de satisfacción para Simeone. El técnico destacó su evolución en el último partido, donde, según su análisis, Llorente fue "de menos a más", brindando múltiples soluciones en el juego. Simeone expresó su esperanza de que Llorente mantenga este buen ritmo, dado el impacto positivo que tiene en el equipo, tanto en tareas defensivas como ofensivas.

Por último, Simeone elogió la solidez del equipo en su conjunto, enfatizando la importancia del trabajo colectivo. Señaló que tanto Llorente como Molina han mostrado un gran rendimiento en sus respectivos papeles y que esa cohesión es vital para continuar en la senda del éxito. "El equipo, en su conjunto, está trabajando bien y esperamos seguir así", concluyó con optimismo el técnico argentino.