24h España.

24h España.

Suiza considera reformar sus normativas financieras tras el desplome de Credit Suisse, a la luz de los estándares reguladores globales.

Suiza considera reformar sus normativas financieras tras el desplome de Credit Suisse, a la luz de los estándares reguladores globales.

La ministra de Finanzas de Suiza, Karin Keller-Sutter, defiende la fusión de Credit Suisse con UBS como la decisión de menor riesgo y con mayores perspectivas de éxito. Según ella, el escenario bancario actual, con una entidad sistémica de gran tamaño, requiere una revisión de la regulación del sector, comparándola con la situación en otros países.

"Tenemos que actuar; no tenemos otra opción", señala Keller-Sutter en una entrevista con el diario 'Neue Zurcher Zeitung', donde destaca la importancia de garantizar que un banco importante pueda quebrar sin arrastrar a todo el país al abismo.

La ministra afirma que también se realizará una comparación con otros países para analizar la rigidez de las regulaciones suizas en relación con este tema. Agrega que el objetivo del Gobierno es proteger al Estado y a los contribuyentes, y que no se trata de una postura hostil hacia los bancos sistémicos.

En cualquier caso, Keller-Sutter sostiene que la caída de Credit Suisse se debió principalmente a los fallos en la gestión del consejo de administración, la dirección y los accionistas de la entidad, en un proceso de decadencia que duró años.

Según ella, para el Consejo Federal estaba claro que si existía una solución con menos riesgos y mejores perspectivas de éxito, el centro financiero no debía ser utilizado como "conejillo de indias" para la implementación de normas que nunca se habían aplicado a un banco importante.

"No se nos permitía jugar a la ruleta rusa con nuestra economía nacional", enfatiza la ministra.

Estas declaraciones llegan días después de que la Autoridad de Supervisión del Mercado Financiero de Suiza (Finma) planteara la necesidad de contar con una base jurídica más sólida, incluyendo la facultad de imponer multas, para hacer frente a crisis como la que desencadenó el colapso de Credit Suisse.

Según el regulador suizo, la desaparición de uno de los dos grandes bancos globales del país fue "traumática". Finma llevó a cabo un análisis exhaustivo de los antecedentes, las actividades de supervisión, la fase aguda de la crisis y las necesidades de cambios resultantes de lo ocurrido con Credit Suisse.

Entre las conclusiones de su evaluación, Finma considera que el colapso de la entidad se debió a la mala implementación de sus estrategias. Además, afirma que, debido a los repetidos escándalos y errores de gestión, Credit Suisse perdió la confianza de sus clientes, inversores y mercados.

El regulador también concluye que la crisis de Credit Suisse resalta la necesidad de contar con una base jurídica más sólida, con instrumentos específicos para abordar el Régimen de Altos Directivos, así como la facultad de imponer multas y establecer normas más estrictas en materia de gobierno corporativo.