El 16 de mayo, Madrid se despertó con la trágica noticia de que dos alpinistas, provenientes de Filipinas e India, perdieron la vida en una expedición al Everest, marcando un sombrío inicio para la temporada de ascensos en 2025, que comenzó en marzo, según fuentes oficiales.

De acuerdo con un informe emitido por el Ministerio de Turismo de Nepal, un alpinista filipino de 45 años falleció debido al agotamiento tras alcanzar el Campamento IV en la tarde del miércoles. Las autoridades confirmaron que su cuerpo fue hallado al día siguiente, en las difíciles condiciones de la montaña.

El fallecido ha sido identificado como Philip II Santiago, y su cuerpo permanece en el Campamento IV, situado a una altitud de aproximadamente 7.900 metros. Las adversas condiciones climáticas y los retos logísticos han complicado la operación de recuperación de sus restos, que todavía permanecen en el lugar.

Por otro lado, Bodhraj Bhandari, director de la empresa Snowy Horizon Treks, confirmó que un ciudadano indio llamado Subrata Ghosh también perdió la vida en las proximidades del escalón de Hillary, justo al descender tras haber alcanzado la cima. Ghosh, que tenía señales de agotamiento y mal de altura, tomó la difícil decisión de no continuar su descenso, según las palabras de su guía.

Bhandari informó que el guía de Ghosh llegó al Campamento IV y comentó que el alpinista se encontraba demasiado fatigado para seguir adelante. "Ghosh se negó a moverse durante el descenso", fue lo que citó el guía.

Finalmente, se están llevando a cabo esfuerzos para recuperar el cuerpo de Ghosh y trasladarlo al Campamento IV, como se reportó en el diario nepalí 'The Himalayan Times'. Ambos montañistas eran parte de una expedición organizada por la Mountaineering Association of Krishnanagar-Snowy Everest, que busca promover la cultura del montañismo en la región.