En un emocionante duelo celebrado el domingo, la selección masculina de fútbol de España logró su pase a la Final a Cuatro de la Liga de Naciones, tras superar a Países Bajos en una intensa tanda de penaltis. Este triunfo se produjo en un contexto complicado, ya que el conjunto español se enfrentó a la presión de jugar sin dos de sus titulares, Rodri Hernández y Dani Carvajal, quienes se encuentran recuperándose de lesiones significativas que los han apartado del terreno de juego desde las primeras jornadas de la competición.

La presente edición de la Liga de Naciones ha servido como escenario para que el entrenador Luis de la Fuente evidencie la sólida plantilla con la que cuenta, demostrando que la selección española, campeona de Europa, puede mantener su competitividad incluso en tiempos difíciles. Las ausencias de Rodri, mediocampista estrella del Manchester City, y Carvajal, destacado lateral del Real Madrid, han representado una prueba de fuego para el equipo.

Ambos jugadores jugaron un papel crucial en la consecución de la Eurocopa el año pasado, pero sus recientes lesiones con sus respectivos clubes han limitado su participación con España, que se ha visto obligada a adaptarse. A pesar de estas adversidades, nuevos talentos como Martín Zubimendi y la pareja de laterales Pedro Porro y Óscar Mingueza han aprovechado la oportunidad para demostrar su valía, cubriendo la falta de estos jugadores clave.

Zubimendi, que ya había dejado claro su potencial al intervenir en la final de la Eurocopa, ha asumido responsabilidades significativas en el centro del campo. Desde la salida de Rodri, ha sido titular en los cinco partidos que España ha disputado en la Nations League, sumando un total de 464 minutos y marcando un gol decisivo en la victoria frente a Dinamarca. Su desempeño ha sido destacado por su precisión en los pases, con un 94% de acierto, además de una notable capacidad para generar jugadas.

Más allá de las cifras, la presencia de Zubimendi en el campo ha sido fundamental para que la selección mantenga su estilo de juego robusto y eficiente, logrando tres victorias y dos empates durante este período, incluido el crucial empate contra los neerlandeses.

Por otro lado, la baja de Carvajal dejó un vacío en el lateral derecho, especialmente tras la retirada de Jesús Navas. Sin embargo, De la Fuente ha respondido con la inclusión de Porro y Mingueza, quienes han sido constantes en sus convocatorias. Porro ha sido el elegido en la mayoría de los encuentros, repartiendo su tiempo de juego con Mingueza, quien fue titular en el decisivo partido de cuartos de final.

Ambos defensores han logrado ofrecer estabilidad defensiva y, al mismo tiempo, contribuir a la salida del balón por banda. Porro, en particular, ha dejado su huella en el equipo al conseguir su primera asistencia con la selección en un contundente triunfo sobre Serbia.

En cuanto a la portería, David Raya se ha mostrado como un bastión durante la ausencia de Unai Simón, quien se recupera de una operación de muñeca. Raya fue titular en la mayoría de los partidos de la fase de grupos, destacándose con un porcentaje de paradas del 91%, mientras que Álex Remiro y Robert Sánchez se repartieron los minutos restantes.