En un comunicado conjunto, España y otros 30 países han instado a los líderes políticos de Venezuela a entablar debates constructivos e inclusivos para lograr una transición con garantías y poner fin a la inestabilidad política en el país. La situación se ha agravado tras las controvertidas elecciones presidenciales de julio, en las que Nicolás Maduro se proclamó vencedor con más del 51% de los votos, mientras que la oposición liderada por Edmundo González denuncia irregularidades y exige un recuento de votos.

En este contexto, se ha pedido la liberación de los detenidos en las protestas opositoras y se ha rechazado la orden de arresto emitida contra González, quien según los registros electorales públicos habría obtenido la mayoría de los votos en los comicios. El comunicado enfatiza la importancia de permitir a los venezolanos expresar sus opiniones de forma pacífica, sin temor a represalias, y denuncia el uso excesivo de la fuerza y la violencia política contra la oposición y la sociedad civil.

La declaración conjunta, suscrita por países como España, Estados Unidos, la Unión Europea y varios países latinoamericanos, surge tras una reunión liderada por el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en Nueva York en el marco de la Asamblea General de Naciones Unidas. En el encuentro participó el ministro español de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, reafirmando el compromiso internacional por una salida pacífica y democrática para Venezuela.