Una serie de ataques aéreos en la ciudad de Alepo, Siria, ha cobrado la vida de al menos diez personas y ha dejado más de una veintena de heridos, marcando un nuevo capítulo en el conflicto que asola la región. Este incremento de la violencia se ha producido justo cuando las fuerzas de oposición, lideradas por el grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham (HTS) y otros aliados, han lanzado una significativa ofensiva en la que es considerada la segunda ciudad más importante del país.

Desde fuentes de la agencia semioficial de noticias de Irán, Tasnim, confirmaron que los bombardeos han sido llevados a cabo por “aviones de combate sirios y rusos”, dirigidos a lo que se ha descrito como una “concentración de terroristas en una rotonda de la ciudad”. Este apoyo militar reafirma la alianza estratégica entre Irán y el Gobierno de Siria en medio de un conflicto que no da signos de amainar.

El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una organización de activistas con una amplia red de contactos dentro de Siria, informa que al menos 30 personas, tanto civiles como milicianos, han perdido la vida en los ataques dirigidos a la rotonda de Al Basil. Según el Observatorio, casi toda la ciudad se encuentra bajo el control del HTS, que incluso ha comenzado a tomar el control del aeropuerto internacional de Alepo, lo que complica aún más la situación humanitaria y de seguridad en la región.

Por su parte, el Ejército sirio ha declarado, poco después de reconocer un “redispliegue” de sus fuerzas a raíz de la ofensiva opositora, el inicio de lo que han calificado como “potentes ataques” en la zona. El objetivo declarado es impedir que los insurgentes fortalezcan sus posiciones, mientras que Rusia, aliada de Siria, ha intensificado sus propias operaciones contra las fuerzas rebeldes en el noroeste del país. Este domingo, Dimitri Peskov, portavoz del Kremlin, caracterizó la situación como “un ataque a la soberanía siria”, insinuando la gravedad de la amenaza a la estabilidad del régimen de Bashar al Assad.

“Estamos a favor de que las autoridades sirias restablezcan el orden en la región y reestablezcan lo más pronto posible el orden constitucional”, expresó Peskov, reflejando el apoyo continuado de Moscú al gobierno sirio en este complicado escenario bélico.

De acuerdo con las estadísticas proporcionadas por el Observatorio, desde el inicio de la ofensiva opositora hace cuatro días en Idlib y Alepo, el conflicto ha dejado ya un saldo trágico de al menos 327 fallecidos, incluyendo tanto civiles como combatientes. La cifra incluye alrededor de un centenar de militares sirios y fuerzas aliadas, así como 155 yihadistas de HTS. El número de víctimas civiles se estima en aproximadamente 50 debido a ataques provenientes de ambos bandos, sacando a la luz la devastadora realidad del conflicto.

RUSIA INFORME QUE 200 MILICIANOS HAN PERDIDO LA VIDA EN SUS ÚLTIMOS ATAQUES

En medio de este contexto bélico, el gobierno ruso ha anunciado el desarrollo de operaciones militares para respaldar a las fuerzas sirias contra el HTS y sus aliados. Oleg Ignasiuk, jefe adjunto del Centro Ruso para la Reconciliación de las Partes en Guerra en Siria, informó que “las Fuerzas Aeroespaciales Rusas han realizado ataques con misiles y bombas contra equipos y personal de grupos armados ilegales”, resultando en la muerte de al menos 200 milicianos en sólo las últimas 24 horas. Esta situación resalta la escalofriante magnitud de la violencia que continúa impactando a la población civil y su futuro en un país desgarrado por la guerra.