En un evento significativo celebrado en Madrid el 14 de enero, Almirall presentó sus proyecciones optimistas para el futuro, anticipando un crecimiento sostenido de doble dígito en sus ventas netas entre 2023 y 2030, así como una notable expansión de sus márgenes a partir del año 2025. Esta información fue compartida durante la Conferencia JPMorgan HealthCare 2025, donde la farmacéutica detalló su renovada estrategia y planes de negocio.

Almirall ha iniciado una nueva fase de expansión, centrando su atención en áreas vitales como la dermatología médica, la excelencia en su modelo comercial y la continua inversión en investigación y desarrollo para fomentar la innovación científica. La empresa busca posicionarse como un referente en el ámbito de la salud dermatológica, donde sus esfuerzos en I+D son cruciales para su evolución.

Uno de los pilares de este crecimiento, según la compañía, es su robusto portafolio de tratamientos biológicos, que ha experimentado una expansión constante, particularmente en el ámbito de la dermatología médica. Entre sus productos estrella se encuentran Klisyri, Wynzora y Seysara, los cuales han sido señalados como factores clave en su trayectoria ascendente.

La farmacéutica destacó el éxito de sus lanzamientos de tratamientos biológicos en mercados estratégicos de Europa, lo que ha validado su enfoque en la excelencia comercial. Con este desempeño, Almirall ha actualizado su previsión de ventas, esperando que el portafolio de biológicos supere los 800 millones de euros, con Ebglyss generando más de 450 millones de euros e Ilumetri alcanzando cifras superiores a 300 millones de euros.

Los avances que Almirall ha logrado en este campo son vistos como un punto de inflexión, resultado de inversiones anteriores en sus capacidades comerciales, además de una sólida infraestructura que apoya el lanzamiento de tratamientos innovadores. La compañía enfatiza que el crecimiento se verá mayormente impulsado por sus tratamientos biológicos, los cuales tienen el potencial de capturar una parte significativa del mercado en segmentos con un crecimiento global continuo.

En su compromiso con la innovación, Almirall planea seguir reforzando sus capacidades de I+D en dermatología médica, con el objetivo de estimular aún más el avance en esta especialidad. Carlos Gallardo, consejero delegado y presidente de Almirall, destacó la importancia del 2025 para la empresa, ya que representa el inicio de una era de crecimiento sostenido y mejora en los márgenes de beneficios.

Por su parte, el director financiero de la compañía, Mike McClellan, subrayó que la sólida situación financiera de Almirall les otorga la flexibilidad necesaria para invertir en oportunidades de crecimiento a largo plazo que se alinean con sus objetivos estratégicos y su ambición de liderar el sector de la dermatología médica.

McClellan concluyó afirmando que, gracias a su sólido portafolio y las inversiones estratégicas que están realizando, la compañía está en una posición óptima para alcanzar sus metas y crear valor sostenible para sus accionistas. También resaltó que la mentalidad colaborativa, la agilidad y la capacidad de aprovechar rápidamente las oportunidades son las principales ventajas competitivas que diferencian a Almirall en el mercado, facilitando además una distribución eficiente de los costes de desarrollo.