El ministro de Exteriores de República Checa, Jan Lipavski, ha convocado este lunes al embajador ruso en Praga, Alexandr Zmeyevski, para protestar por la presunta campaña de ciberataques rusos contra políticos e instituciones checas. Aunque Moscú negó cualquier relación con los ataques, el jefe de la diplomacia checa ha expresado su preocupación y solicitado a Rusia que se abstenga de este tipo de comportamientos, considerados contrarios a las normas internacionales y a sus propias obligaciones.

El Ministerio de Exteriores checo confirmó la semana pasada que un grupo de 'hackers', conocido como APT28 y presuntamente vinculado a la Inteligencia militar rusa, ha estado realizando ataques contra instituciones checas desde el año pasado. Estos ataques tienen como objetivo amenazar la seguridad y estabilidad del país, lo que ha generado alerta en la Unión Europea y la OTAN, que denunciaron una campaña de ciberataques también en Alemania y República Checa.

A pesar de las acusaciones, el embajador ruso en Estados Unidos, Anatoli Antonov, negó cualquier implicación de Rusia en estos ciberataques y aseguró que es un intento por parte del "Occidente colectivo" de desviar la atención de sus propias acciones. Antonov también señaló que la mayoría de los ataques informáticos en el mundo provienen del territorio de Estados Unidos, desviando la responsabilidad hacia el país norteamericano.