El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha sorprendido este viernes al anunciar su decisión de retirarse como candidato de Movimiento Reformista Belga (MR) a las elecciones del Parlamento Europeo. Esta medida se debe a las fuertes críticas recibidas por la situación de interinidad que se crearía en el Consejo tras su salida prematura.

En un comunicado publicado en sus redes sociales, Michel afirmó que no quiere que esta decisión distraiga ni socave la institución europea y el proyecto europeo. Además, expresó su preocupación por el uso indebido de esta controversia para dividir al Consejo Europeo.

El ex primer ministro belga reconoció haber previsto que su candidatura provocaría polémica, pero subestimó la magnitud y radicalidad de las reacciones negativas, especialmente fuera del Consejo Europeo. Michel lamentó la prevalencia de los ataques personales en el discurso democrático, y aceptó la legitimidad de las críticas y los argumentos intelectuales.

Dadas las circunstancias generadas, Michel admitió que la situación le hizo replantearse su "compromiso electoral". Decidió no ser candidato en las elecciones europeas y dedicar todos sus esfuerzos a sus responsabilidades actuales hasta el final. Michel reiteró su apoyo a una Europa democrática, fuerte y unida, y mencionó que tomará tiempo para reflexionar tras finalizar su mandato.

Se planteaba un escenario complicado si Michel hubiera obtenido un escaño en el Parlamento Europeo este verano. Debido a esto, el ex primer ministro belga debería haber abandonado la presidencia del Consejo Europeo antes de que terminara su mandato en noviembre de este año. Aunque su equipo argumentó que no había impedimentos legales para esto, hubo preocupaciones sobre la posible asunción provisional del líder húngaro, Viktor Orbán, como presidente del Consejo de la UE mientras se decidía el reemplazo de Michel.