En un giro notable de los acontecimientos, el exdiputado de Sumar, Íñigo Errejón, y la actriz Elisa Mouliaá se presentan ante los juzgados de Plaza de Castilla en Madrid este viernes. Su comparecencia tiene como objetivo la entrega de sus teléfonos móviles, herramientas clave que la Policía Nacional pretende analizar para esclarecer las conversaciones que ambos sostuvieron.

Este procedimiento es parte de la investigación liderada por el juez Adolfo Carretero, titular del Juzgado de Instrucción Número 47 de Madrid. La pesquisa se centra en las graves acusaciones de agresión sexual que ha formulado Mouliaá contra el exrepresentante político.

Aunque se había fijado una cita anterior para la entrega de los dispositivos, la actriz se enfrentó a problemas técnicos que impidieron el análisis de su móvil en la última ocasión. A la salida del juzgado, Mouliaá declaró a los medios que se siente tranquila ante la situación: "Los hechos hablan por sí solos. No tengo nada que esconder y aquí estoy", aseguró.

Por su parte, Errejón había impugnado la solicitud del juez, solicitando un aplazamiento hasta que la Audiencia Provincial tomara una decisión sobre su apelación. Sin embargo, mostró disposición para comparecer ante el juez y presentar directamente el contenido de las conversaciones que se investigan.

Finalmente, la decisión del juez ha puesto fin a las dudas y ha establecido una nueva fecha y hora para la entrega de los dispositivos. El análisis de los teléfonos de Errejón y Mouliaá permitirá extraer las comunicaciones que ambos mantuvieron, un paso crucial en la revisión de este caso complejo.

El viernes, Mouliaá deberá llegar a los juzgados a las 10:00 horas, mientras que Errejón lo hará 30 minutos después, marcando así un día importante en el avance de esta controversia legal.