**MADRID, 30 de junio.** En un reciente comunicado, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) admitieron su implicación en la trágica muerte de varios civiles palestinos durante la distribución de ayuda humanitaria en Gaza. Estos incidentes ocurrieron cerca de los puntos de entrega gestionados por la Fundación Humanitaria de Gaza.

Las FDI argumentaron que los disparos fueron el resultado de una situación crítica en la que los soldados percibieron una amenaza a su seguridad. Sin embargo, han rebajado las cifras de víctimas divulgadas por Hamás, enfatizando que la respuesta disparada no fue un ataque directo contra la población civil, sino una reacción a lo que consideraron un riesgo.

En su informe, las FDI confirmaron al menos tres incidentes donde se utilizó fuego real de manera "imprecisa" en las cercanías de los lugares de distribución. Esto resultó en un número estimado de entre 30 y 40 civiles afectados, incluyendo tanto a heridos como a fallecidos. Reconocieron que tales eventos "no debieron haber ocurrido".

Pese a lo sucedido, el Ejército israelí aseguró que estas acciones no formaban parte de una estrategia deliberada contra la población civil, según informa el diario 'The Times of Israel'.

En medio de esta controversia, las Fuerzas de Defensa de Israel también anunciaron una revisión de su plan de distribución de ayuda. El objetivo es evitar la repetición de incidentes mortales y, simultáneamente, impedir que la asistencia humanitaria caiga en manos de Hamás.

Como parte de estas medidas, se ha decidido cerrar temporalmente la zona de Tel al Sultán y reubicar el punto de distribución a un lugar más seguro, diseñado para mitigar las tensiones con la comunidad local y garantizar la seguridad de las tropas.

El mensaje enviado a través de la plataforma X subrayó que estas acciones están destinadas a asegurar un flujo rápido y seguro para los residentes, facilitar la distribución ordenada de la ayuda y mantener las operaciones de las FDI en curso.