El Gobierno ruso ha advertido que responderá con "acciones concretas" al presunto ataque con drones que, según Moscú, fue perpetrado contra el Kremlin y del que ha culpado a las autoridades ucranianas. El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ha denunciado que fue "un acto hostil" llevado a cabo por "los terroristas de Kiev". El Kremlin cree que el presidente ruso, Vladimir Putin, era el objetivo del ataque y ya ha amenazado con adoptar medidas de represalia.

Lavrov ha sugerido que se tomarán medidas, aunque no ha precisado cuáles o cuándo se aplicarán. "Tenemos mucha paciencia", ha añadido el ministro en una rueda de prensa celebrada en India, según la agencia de noticias Interfax.

El Gobierno ruso ha insinuado que Estados Unidos es el responsable indirecto del ataque por su apoyo directo a Ucrania. A pesar de las acusaciones, no se han podido verificar de forma independiente y apenas han aparecido imágenes del incidente.

Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha negado rotundamente cualquier participación, asegurando que Kiev no lanza ataques en territorio ruso y se limita a responder a la ofensiva iniciada por orden de Putin sobre Ucrania en febrero de 2022.