Los residentes evacuados en cuatro comunidades locales tienen la oportunidad de regresar a sus hogares, aunque la situación permanece crítica para los habitantes de Avellanar y Robledo, quienes todavía están desplazados.

CAMINOMORISCO (CÁCERES), 31 de julio.

Este jueves, los trabajadores que luchan contra el incendio en la región cacereña de Las Hurdes están concentrando sus esfuerzos en asegurar dos kilómetros de línea de contención en Avellanar, aprovechando unas condiciones climáticas que han sido calificadas como "muy favorables". Esto ocurre tras una noche de trabajo arduo que resultó ser "extremadamente compleja".

Abel Bautista, el consejero de Presidencia, Interior y Diálogo Social de la Junta de Extremadura, comentó sobre la situación a los medios tras una reunión del Cecopi que tuvo lugar en la mañana de este jueves, destacando los retos presentados por la configuración geográfica de la zona afectada.

Durante la noche, la atención se centró en la problemática de Avellanar, donde los equipos han estado dedicando esfuerzos a "consolidar el flanco sur" del incendio. Hasta ahora, se estima que un 70% de la frontera del incendio ya está asegurada.

No obstante, quedan por asegurar dos kilómetros de línea de contención en Avellanar, que se están atacando con técnicas manuales en el terreno, además de utilizar recursos aéreos y de agua, con un total de seis aeronaves desplegadas en la zona en este momento.

Frente a esta situación, los esfuerzos de extinción se enfocarán durante la mañana en esa línea de contención crucial en Avellanar, que es vital para el control del incendio. En otras áreas, se llevarán a cabo "tareas de refresco", donde el personal continuará trabajando para consolidar y repasar las zonas donde ya hay una percepción de mayor tranquilidad.

(Más información en Europa Press)