
El fabricante de componentes automotrices Mahle, con sede en Alemania, ha tomado la decisión de llevar a cabo una reestructuración en sus instalaciones de Motilla del Palancar, Cuenca, y en el Centro Tecnológico de Paterna, Valencia, lo cual resultará en la eliminación de 740 puestos de trabajo, lo que representa una drástica reducción del 30% de su plantilla en España, que actualmente cuenta con 2.500 empleados.
Específicamente, la empresa planea eliminar 550 empleos en su planta de Motilla del Palancar y 190 en Paterna. Según fuentes de la compañía, esta decisión ha surgido tras una exhaustiva revisión de las circunstancias operativas, concluyendo que la reducción de personal se ha vuelto "inevitable".
La implementación de esta reestructuración se gestionará durante los próximos meses en distintas etapas, ajustándose a la evolución del negocio en el futuro. Mahle justifica esta drástica medida por la incertidumbre que envuelve al sector automotriz, marcada por desafíos como los aranceles y la desaceleración de los mercados, especialmente en la transición hacia vehículos eléctricos.
La empresa ha señalado que los retos a los que se enfrenta el sector, desde la disminución del crecimiento en la industria automotriz global hasta las incertidumbres comerciales, han llevado a que la situación se torne insostenible. Entre estos factores, la baja expectativa de volumen en el área de movilidad eléctrica también ha jugado un papel importante en la decisión.
Mahle ha comenzado un proceso de diálogo con los representantes laborales con el fin de encontrar “soluciones justas y socialmente aceptables” para quienes se verán afectados por los despidos, reiterando su disposición a continuar su actividad en el país en el futuro.
La compañía, con presencia en España desde los años 70, cuando inauguró su primera fábrica en Montblanc, Cataluña, ha promovido hasta ahora el empleo a través de ocho centros de producción en todo el territorio, lo cual convierte esta medida en un fuerte golpe para la comunidad laboral.
El sindicato CC.OO. Cuenca ha expresado su rechazo rotundo al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) anunciado por Mahle en Motilla del Palancar, argumentando que este afectará de manera significativa a la mayoría de los empleados, lo que consideran una decisión "drástica". La organización ha subrayado su intención de estudiar el caso para proteger a los trabajadores que perderán su empleo y ha instado a las administraciones a intervenir para mantener los puestos de trabajo.
Es importante mencionar que tan solo un año atrás, Mahle era reconocida por su compromiso de casi duplicar su plantilla para 2026, respaldada por los fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. A este efecto, había recibido 40 millones de euros del programa Perte VEC y del Programa Moves Singulares.
Dentro de una semana, está previsto que se establezca una mesa de negociación entre la empresa y los representantes de los trabajadores, donde Mahle se ha comprometido a buscar alternativas para mitigar el impacto de estos despidos, manteniendo al mismo tiempo su intención de continuar operando en el mercado español.
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