En un nuevo paso hacia la lucha por la soberanía ucraniana, las autoridades del Reino Unido han implementado sanciones significativas contra varios funcionarios rusos, incluidos altos mandos del Gobierno, en respuesta a la continua invasión de Ucrania. Esta decisión, anunciada en la jornada de este viernes, apunta directamente al viceministro de Defensa, Pavel Fradkov, así como a otros dos altos cargos y dos empresas que, según Londres, amenazan la integridad territorial del país en conflicto.

Las sanciones implican la congelación de los activos de estas personas y entidades dentro del Reino Unido. Los perjudicados por estas medidas incluyen a Fradkov, al jefe del Servicio Federal para el Control Técnico y de Exportación (FSTEK), Vladimir Selin, y también a Artiom Chaika, quien se desempeña como enviado especial en el Cáucaso del Norte y es miembro del Consejo de Seguridad ruso.

Desde el Gobierno británico se ha señalado que estos altos funcionarios han abusado de su posición para acelerar el apoyo al Kremlin. Además, se les acusa de participar activamente en esfuerzos por socavar la soberanía, integridad y la independencia de Ucrania, de acuerdo con la información proporcionada en un comunicado oficial.

Las empresas afectadas por estas nuevas sanciones son Rosatom Additive Technologies y Kirov Energomash, ambas operando en sectores críticos como la defensa y la energía dentro de Rusia. Con esta acción, se eleva a casi 21.700 el número de individuos vinculados al Gobierno ruso que han sido sancionados desde el inicio del conflicto en Ucrania, que lleva en curso cerca de tres años.