A medida que la situación en Oriente Medio se intensifica, la ONG Save the Children ha emitido un severo aviso sobre la alarmante crisis que enfrentan los derechos de los niños en Palestina, enfatizando que esta problemática ha quedado opacada por la devastadora violencia que se vive en Gaza.

En un comunicado difundido el 22 de julio desde Madrid, la organización ha revelado que más de 600 niños han sido obligados a abandonar sus hogares en Cisjordania en los primeros seis meses de 2025, un récord alarmante que se suma a los más de 1.200 desplazados en total durante este periodo. Esta situación se vuelve aún más crítica al considerar que desde 2009, cuando comenzaron los registros, se han visto afectados más de 10.300 menores.

El incremento en el número de desplazados en Cisjordania ha sido notable desde el 7 de octubre de 2023, cuando se desataron una serie de ataques por parte de Hamás y otros grupos palestinos, llevando a Israel a lanzar una ofensiva militar devastadora en Gaza y a intensificar sus operaciones en Cisjordania.

Save the Children ha denunciado una "estrategia sistemática" por parte de las autoridades israelíes, que buscan apropiarse de áreas de Cisjordania mediante la demolición de viviendas y la confiscación de tierras, lo que ha causado el desplazamiento de más de 38.000 palestinos desde octubre de 2023. Este proceso de desalojo ha sido exacerbado por el enfoque militar en el norte de Cisjordania, donde la mayoría de las incursiones se han concentrado.

Además, las estadísticas revelan la gravedad de la situación: al menos 420 vidas palestinas han sido perdidas y cerca de 950 personas han resultado heridas a raíz de los ataques en Cisjordania este año, mientras más de 900 propiedades han sido destruidas. Desde octubre de 2023, aproximadamente 2.400 palestinos, incluidos muchos niños, también han sido desplazados por la violencia ejercida por colonos israelíes, según cifras de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).

El director de Save the Children para Oriente Próximo, Ahmad Alhendawi, subraya que "las prácticas de las autoridades israelíes están estrangulando la vida cotidiana de los palestinos en Cisjordania". Alhendawi enfatiza el impacto devastador que estas políticas tienen sobre los más vulnerables: "Los hogares de los niños están siendo destruidos, sus esperanzas truncadas y sus vidas desgarradas".

"Es inaceptable que cualquier niño crezca bajo la sombra del desplazamiento, la violencia o la detención militar. Esto es una crisis de derechos infantiles que se ve eclipsada por la violencia aún más terrible en Gaza", ha declarado Alhendawi, recordando que ninguna forma de abuso puede ser justificable. "Todas las violaciones son igualmente importantes. Los niños, sin importar el contexto, merecen protección", afirmó con firmeza.

El panorama en Cisjordania es sombrío. Aunque no se vive una guerra formal, las cifras de niños desplazados, agredidos, encarcelados y asesinados están en niveles récord. Alhendawi expresa su frustración con la comunidad internacional, señalando que "no pueden hacerse los desentendidos ante esta realidad", y advierte que el silencio global solo perpetúa estos abusos. "Este ciclo de violencia debe cesar", concluye.