Desde el inicio del conflicto en Gaza el 7 de octubre de 2023, las autoridades locales informan que el hambre y la desnutrición han cobrado la vida de cerca de 370 personas, incluyendo un número alarmante de niños. La situación humanitaria se ha deteriorado rápidamente debido a las restricciones impuestas por Israel, lo que ha dificultado la llegada de ayuda vital a los ciudadanos gazatíes.

En un comunicado difundido a través de su cuenta de Facebook, el Ministerio de Sanidad en Gaza reportó que, solo en el último día, al menos seis individuos, entre ellos un niño, han fallecido a causa de la crisis alimentaria. Con esto, el total de muertes atribuidas al hambre ha ascendido a 367, destacando un desgarrador número de 131 infantes entre las víctimas.

El ministerio también subrayó que, tras la declaración de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (IPC) el 15 de agosto, que identificó a Gaza como una zona de hambruna, se han registrado 89 muertes relacionadas con esta causa, incluyendo 16 menores. La alerta sobre el agravamiento de la situación humanitaria en la región ha sido motivo de gran preocupación internacional, con llamados urgentes a una acción significativa.

La ofensiva israelí, que comenzó como respuesta a ataques de facciones palestinas lideradas por Hamás el 7 de octubre, ha dejado más de 63,600 palestinos fallecidos hasta el momento, según los reportes de las autoridades de Gaza. Este dramático panorama se ve agravado por las severas limitaciones impuestas por el Ejército israelí a la ayuda humanitaria, lo que ha generado crecientes denuncias de la comunidad internacional sobre la gravedad de la situación en el territorio.