Las secciones sindicales de Bridgestone Hispania, que incluyen a CCOO, UGT, SITB, ELA y BUB, han levantado la voz contra el anunciado Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a 546 trabajadores en las plantas de Basauri y Puente San Miguel. Consideran que esta medida es "inaceptable e injustificada", un ataque directo a la dignidad de toda la plantilla, y han prometido responder con firmeza ante esta acción.

El pasado martes, la dirección de Bridgestone Hispania Manufacturing convocó a los representantes sindicales a una reunión extraordinaria. Durante esta cita, comunicaron que en vista de una situación que describieron como "estructural", procederían a la presentación de un ERE que impactaría considerablemente en la fuerza laboral de ambos centros de trabajo.

En concreto, en la planta de Basauri, se prevé que 335 de 831 empleados se verán afectados, mientras que en Puente San Miguel, 211 de los 418 trabajadores también enfrentarán esta severa medida. Los sindicatos consideraron que tal decisión es un verdadero despropósito y señalaron la incompetencia de la dirección al permitir que los problemas de producción a nivel europeo recaigan sobre los hombros de las instalaciones en España.

Critican que estos centros han soportado múltiples recortes de producción y ajustes salariales, con una repercusión mínima en otras fábricas de Bridgestone en Europa. En su declaración, los sindicatos subrayaron que la rapidez con la que se están analizando los sectores de camión y agrícola revela una naturaleza premeditada detrás de esta decisión.

Además, acusan a la dirección de transgredir la buena fe y de falto de respeto hacia sus representantes y hacia todos los trabajadores, al tomar decisiones que consideran inmorales y desproporcionadas. En su argumentación, recalcaron la insensibilidad de la empresa respecto a las consecuencias humanas y sociales que esta medida conlleva.

La incertidumbre generada entre los empleados de Basauri y Puente San Miguel es alarmante, ya que el ERE podría presagiar un cierre inminente. Los sindicatos han calificado como "intolerable" la aceptación del discurso de la alta dirección de la empresa por parte de los responsables de las fábricas, acusándolos de colaborar en el desmantelamiento de la presencia de Bridgestone en España.

A pesar de los sacrificios realizados por la plantilla, la promesa de un futuro mejor se desvanece con este anuncio. Ante este escenario, los sindicatos han propuesto soluciones inmediatas, justas y solidarias, en contraste con el enfoque destructivo que la empresa ha optado por seguir, siendo esta una compañía que cuenta con beneficios significativos.

La decisión del ERE y la actuación de la empresa han sido catalogadas como un ataque generalizado, sin excepción, a toda la plantilla de 2.800 trabajadores de Bridgestone Hispania. Haciendo un llamado a la solidaridad, los sindicatos han decidido actuar con la misma contundencia que la empresa, anunciando su intención de interponer formalmente una solicitud de huelga en los centros afectados.