El líder de Vox, Santiago Abascal, ha arremetido contra el PP por su postura ante las declaraciones de Javier Milei sobre la esposa de Pedro Sánchez, acusándolos de unirse al PSOE y exigiendo a Alberto Núñez Feijóo que corte de inmediato cualquier relación con los socialistas a nivel nacional e internacional.

Abascal, en una rueda de prensa en la sede de su partido, criticó la actitud del PP al sumarse a la presunta campaña de desprestigio liderada por el PSOE y sus medios de comunicación contra figuras internacionales, demostrando, en su opinión, una falta de comprensión de la política internacional por parte de los 'populares'.

El vicesecretario institucional del PP, Esteban González Pons, reprochó a Milei por sus comentarios sobre Begoña Gómez, considerándolos una intromisión en asuntos internos de España durante un evento de Vox este fin de semana.

Vox señaló que el PP tiene problemas para elegir aliados no solo a nivel nacional, sino también en el escenario internacional, recordando episodios donde atacaron a líderes como Trump en EE. UU, Bolsonaro en Brasil o Giorgia Meloni en Italia.

Abascal criticó a Feijóo por despreciar una oferta de alianza para denunciar la supuesta deriva extremista del Gobierno de Sánchez, acusando al PP de preferir una alianza con el PSOE en lugar de buscar un frente común contra el socialismo.

Ante esta situación, Abascal expresó gran preocupación por la supuesta falta de visión internacional del PP y les instó a rectificar y dejar de engañar a los españoles.

Abascal pidió al PP que rompa de forma inmediata sus lazos con los socialistas tanto en España como en Europa, explicando esta ruptura a sus socios europeos y decidiendo si pactarán con los socialistas en las elecciones al Parlamento Europeo en junio.

En cuanto a la respuesta del Gobierno solicitando disculpas públicas por las declaraciones de Milei y amenazando con consecuencias si estas no se producen, Abascal lo consideró una tomadura de pelo y acusó al Ejecutivo de iniciar un conflicto diplomático con Argentina.

Abascal defendió que Milei solo respondió a las acusaciones del Gobierno español sobre la ingesta de sustancias del presidente argentino, calificando la reacción del Ejecutivo como una utilización de las instituciones y una creación de conflicto diplomático por intereses particulares.