En un preocupante giro de los acontecimientos, los rebeldes hutíes de Yemen han declarado este martes que el número de víctimas mortales en los ataques aéreos israelíes sobre la ciudad portuaria de Hodeida ha ascendido a cuatro, con cerca de 40 heridos. Esta agresión se produce en un contexto de escalada tras un ataque de los insurgentes contra el principal aeropuerto de Israel.

Según la información proporcionada por las autoridades hutíes, tres personas perdieron la vida y otras 35 resultaron lesionadas tras un bombardeo en una fábrica de cemento en Bajil. Posteriormente, se localizó el cuerpo de una cuarta víctima en el puerto de Hodeida, según datos emitidos por el Ministerio de Sanidad y تinformados por la cadena Al Masira.

Los hutíes han señalado a Estados Unidos e Israel como responsables de estos ataques, aunque solo el Ejército israelí ha admitido haber llevado a cabo las ofensivas. Hasta el momento, el gobierno estadounidense no ha hecho declaracion alguna sobre la situación.

Las Fuerzas Armadas de Israel confirmaron que alrededor de 20 aviones de caza participaron en las operaciones contra lo que consideran “objetivos terroristas” relacionados con los hutíes en Hodeida y sus alrededores, lanzando aproximadamente 50 proyectiles en total.

Israel argumenta que los hutíes han estado operando bajo la influencia y financiación de Irán durante un año y medio, con la intención de desestabilizar la región y comprometer la seguridad en el tránsito marítimo global, haciendo referencia a las recientes agresiones a embarcaciones asociadas con Israel que navegan por las cruciales rutas marítimas en el área alrededor de Yemen.