24h España.

24h España.

El Gobierno vasco condena la falta de respeto hacia Pradales y el euskera por parte de Ayuso y otros líderes.

El Gobierno vasco condena la falta de respeto hacia Pradales y el euskera por parte de Ayuso y otros líderes.

El uso de lenguas cooficiales como el catalán, gallego y castellano durante eventos institucionales es visto como un paso adelante en el respeto a la diversidad lingüística y democrática del país. Este es el mensaje que se desprende de la reciente intervención del Lehendakari, Imanol Pradales, en la Conferencia de Presidentes que tuvo lugar en Barcelona.

El Lehendakaritza ha manifestado su indignación ante lo que considera una "falta de respeto" hacia el euskera, su titular y la comunidad vasca, en respuesta a la reacción de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y otros líderes autonómicos que mostraron su desaprobación durante la intervención del Lehendakari en su lengua materna.

La intervención de Imanol Pradales, que se llevó a cabo el pasado viernes, marcó un hito al ser la primera vez que se permitía el uso de lenguas cooficiales en este foro. No obstante, el acto fue empañado por la decisión de Díaz Ayuso de abandonar la sala cuando comenzó a hablar en euskera, lo cual generó un ambiente de tensión en la reunión.

Desde Lehendakaritza, se ha expresado un "profundo malestar" ante la actitud de varios presidentes autonómicos, principalmente de aquellos pertenecientes al Partido Popular, que optaron por no utilizar el servicio de traducción disponible, lo que impidió una comunicación fluida y el intercambio pleno de ideas.

Asimismo, se ha señalado que la intervención del Lehendakari se realizó de acuerdo con el marco establecido por los organizadores de la Conferencia, que promovieron el uso del catalán, gallego y castellano en un esfuerzo por reflejar la diversidad cultural del Estado. Esto es considerado un "avance democrático" que fomenta el respeto por la pluralidad lingüística.

Finalmente, se enfatiza que el reconocimiento y el respeto hacia las lenguas oficiales no es solo una formalidad, sino un derecho fundamental que refleja la igualdad lingüística, el respeto institucional y cultural. En este sentido, el euskera no solo es una lengua oficial en España, sino que también forma parte del patrimonio lingüístico europeo.