El Gobierno francés ha expresado su rechazo a los recientes ataques perpetrados por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) contra las posiciones de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL). Francia ha hecho un llamado urgente a garantizar la seguridad de los 'cascos azules' y de todas las instalaciones de la ONU, reiterando la importancia de cumplir con el Derecho Internacional en este contexto.

A través de un comunicado oficial, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia destacó que este incidente es parte de una serie de agresiones previas ocurridas a principios de octubre, enfatizando la necesidad de que la FINUL pueda llevar a cabo su labor con total autonomía y con la libertad de movimiento que requiere en el sur de Líbano.

El Ministerio también aprovechó la ocasión para reconocer la valentía y la dedicación del personal de la FINUL, que operan en condiciones cada vez más inciertas y peligrosas, destacando su compromiso con la paz en la región.

Francia, que tiene aproximadamente 650 soldados en la misión de la FINUL, insistió en la necesidad de respetar el alto el fuego acordado entre Israel y el grupo Hezbolá hace casi un año. Reiteró que no se deben permitir excepciones a este acuerdo y que Israel debe cesar cualquier actividad militar en territorio libanés.

Este domingo, la FINUL reportó la presencia de un dron sobrevolando una de sus patrullas en Kfar Kila, así como el lanzamiento de una granada. Poco después, un tanque israelí abrió fuego en dirección a los efectivos de la ONU, aunque la misión confirmó que no se registraron daños personales ni materiales.

Por su parte, el Ejército israelí ha acusado a los 'cascos azules' de haber derribado deliberadamente un dron que, según ellos, no representaba una amenaza. Además, el ejército negó haber disparado contra las fuerzas de la ONU, aunque admitió haber lanzado una granada con el propósito de disuadir a los 'cascos azules' de acercarse a la zona del incidente.