En el contexto de la creciente tensión en Cisjordania, el Ejército israelí ha sido acusado este martes de haber dado muerte a dos palestinos en las inmediaciones de la ciudad de Qalqilia. Este suceso, que se produce en un marco de operaciones militares intensificadas por parte de las fuerzas de seguridad israelíes, ha desatado críticas por parte de las autoridades palestinas que caracterizan estas acciones como un abuso de poder en la región.

El Ministerio de Sanidad de la Autoridad Palestina ha informado a través de su canal en Telegram que las víctimas, identificadas como Muhamad Zaki Daud Ashqar y Diaa Sharif Hasán Salmi, fueron alcanzadas por disparos realizados por lo que definen como "fuerzas de ocupación" en el área de Sufin, situada al este de Qalqilia. Por el momento, el Ejército israelí no ha emitido ningún comentario sobre este trágico incidente, lo que añade incertidumbre a la situación ya de por sí tensa.

Desde el 7 de octubre de 2023, tras un asalto coordinado por Hamás y otras facciones palestinas que dejó cerca de 1.200 muertos y alrededor de 250 rehenes, las operaciones del Ejército israelí y los ataques de colonos en Cisjordania, así como en Jerusalén Este, han resultado en la muerte de más de 800 palestinos. Este número refleja un aumento alarmante en la violencia que ha marcado los últimos meses en la región.

Además, las autoridades de Gaza, controladas por Hamás, han denunciado la brutalidad de la ofensiva militar israelí en el enclave, que hasta ahora ha causado la muerte de más de 45.000 palestinos y ha dejado a más de 107.000 heridos. Estos informes sugieren que el conteo de víctimas podría ser aún mayor, intensificando la preocupación sobre el impacto humanitario de este conflicto que parece no tener fin.