
En un reciente giro de los acontecimientos políticos en España, Koldo García, quien fue consejero del expresidente del gobierno, José Luis Ábalos, ha lanzado duras críticas hacia Santos Cerdán, el antiguo 'número tres' del PSOE. Según García, la relación amistosa que mantiene con Ábalos ha generado celos en Cerdán, a quien descalificó llamándolo "amargado".
En su mensaje dirigido a su esposa, García expresó su desdén hacia Cerdán y un empresario asociado a él, destacando que ambos se la pasan "de fiesta en fiesta" en Madrid, derrochando dinero. El exasesor no escatimó en palabras para expresar su desprecio, afirmando que "solo necesitan miseria para sentirse felices". Estas revelaciones provienen de un extenso informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil relativo al 'caso Koldo', que ha llevado a Cerdán a dimitir de su cargo como secretario de Organización del PSOE y a renunciar a su escaño como diputado.
Los detalles sobre la dinámica de amistad entre Koldo y Ábalos, en contraste con la creciente incomodidad provocada por Cerdán, son atestiguaciones clave en la investigación. Finalmente, la lealtad de García hacia Ábalos le llevó a darse cuenta de que su relación con Cerdán se estaba deteriorando debido al celo del politico socialista.
En conversaciones privadas, García informó a su mujer sobre la actitud de Cerdán, aludiendo a su propensión a tratar de entrometerse en su relación con Ábalos. "El pequeño está intentando que le cuente cosas para poder venderte", le confió a su esposa, quien apuntó que, a diferencia de Cerdán, "Barriguitas", en referencia a Ábalos, lo trata mucho mejor.
Ante la inquietud de su esposa sobre las intenciones de Cerdán, quien parecía anhelar arruinar la conexión entre él y Ábalos, Koldo no tuvo reparos en mostrar su desapego ante la situación: "Me da igual. Que se mueran todos", respondió ante el temor de su mujer sobre las maniobras de Cerdán.
En un nuevo intercambio, Koldo y Ábalos discuten sobre la necesidad de que el ministro se rodee exclusivamente de aquellos "fieles" a su gestión, resaltando la importancia de mantener una imagen digna. De esta manera, Koldo se mostró dispuesto a solicitar a Cerdán la concesión de obras públicas en un intento de obtener recursos económicos, aunque su conversación reveló la inestabilidad financiera que enfrentaba Ábalos.
Durante su charla, el exministro confesó estar en una situación económica precaria, llegando al extremo de decir que apenas le quedaban 50 euros para subsistir en la semana. García intentó buscar soluciones, sugiriendo que su hijo debería contribuir financieramente. Ábalos reconoció que, a pesar del apoyo de su hijo, sus gastos eran abrumadores, especialmente por conceptos de alquiler, que lo habían llevado a gastar una exorbitante cifra en un corto período de tiempo.
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