En un giro notable de los acontecimientos, Leire Díez, exmilitante del PSOE, ha manifestado su resistencia a entregar un pendrive a la comisión de investigación del Senado relacionada con el 'caso Koldo'. Este dispositivo, que ella misma había entregado a su antiguo partido en junio pasado, está actualmente bajo el escrutinio de la Fiscalía de la Audiencia Nacional. Díez argumenta que facilitar dicho archivo implicaría comprometer el secreto de sus fuentes y la integridad de su trabajo periodístico.

La oposición de Díez se ha reflejado en una declaración escrita a la que ha tenido acceso Europa Press, tras una solicitud del Partido Popular que, aprovechando su mayoría en el Senado, intentó obtener el pendrive en cuestión. Esta solicitud generó una situación tensa, dada la delicadeza del contenido que se encuentra bajo investigación judicial.

La exmilitante subraya que el pendrive forma parte de un proceso judicial activo y, por lo tanto, se opone a ceder ningún tipo de copia de su trabajo. Asegura que hacerlo sería equivalente a desvelar no solo sus fuentes, sino también información que aún no ha sido publicada, en adición a otros materiales de trabajo como metadatos y comunicaciones privadas.

En este sentido, Leire Díez ha solicitado el reconocimiento de su derecho a la confidencialidad profesional, reafirmando que no es procedente la entrega de materiales periodísticos ni la divulgación de sus fuentes de manera directa o indirecta. Esta situación pone de manifiesto la tensión entre las demandas de transparencia política y la protección del ejercicio del periodismo.