El presidente ruso ha tomado una postura firme al anunciar que no asistirá a la cumbre del G20 en Brasil, argumentando que su presencia podría alterar el funcionamiento de la reunión. En su lugar, Putin ha propuesto a Rusia como intermediario sincero en las negociaciones entre Israel e Irán.
En una rueda de prensa durante la cumbre de los BRICS en Moscú, Putin ha advertido sobre la posibilidad de que Ucrania adquiera armas nucleares, asegurando que Rusia responderá adecuadamente a esta amenaza. Además, ha criticado la presencia de la OTAN en el conflicto, acusando a la organización de hacerle la guerra a través de Ucrania.
Putin ha expresado su desconfianza hacia las propuestas de paz provenientes de Occidente y ha destacado la importancia de la relación entre Rusia y China para la estabilidad estratégica mundial. Asimismo, ha advertido sobre el despliegue de armamento estadounidense en Asia Pacífico, generando nuevas tensiones en la región.
El presidente ruso ha dejado claro que no tiene intenciones de asistir a la cumbre del G20 en Río de Janeiro, argumentando que no quiere interferir en el desarrollo del evento. Putin también ha abordado la orden de detención emitida en su contra por el Tribunal Penal Internacional por crímenes de guerra, asegurando que el TPI carece de jurisdicción en muchos países.
Putin ha reiterado la postura de Rusia a favor de la creación de un Estado palestino y se ha ofrecido como intermediario en un posible diálogo entre Israel e Irán, con el objetivo de evitar un intercambio de ataques que podría desencadenar una crisis aún mayor. En este sentido, Putin se ha mostrado dispuesto a colaborar en la búsqueda de un acuerdo entre ambas partes.
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