MADRID, 29 de octubre.

Este jueves 30 de abril, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comparecerá ante la 'comisión Koldo' del Senado, donde responderá a las preguntas planteadas por los grupos parlamentarios. Desde Moncloa, se anticipa que el líder del Ejecutivo asumirá una postura institucional para hacer frente a un interrogatorio del Partido Popular (PP), que se prevé complicado y cargado de tensiones.

La comparecencia se produce a instancias del PP, que tiene la mayoría absoluta en el Senado. Sánchez será preguntado acerca de las supuestas irregularidades que involucran a dos de los últimos secretarios de Organización del PSOE, José Luis Ábalos y Santos Cerdán, así como a Koldo García, un exasesor del Gobierno. Todos ellos están bajo investigación por el Tribunal Supremo por supuestos delitos de corrupción relacionados con el cobro de sobornos, y Cerdán se encuentra actualmente en prisión preventiva desde junio en Soto del Real, Madrid.

En la sesión, el presidente estará acompañado por el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas, y un asesor de Moncloa. A pesar del ambiente adverso, fuentes del Gobierno indican que Sánchez se presentará para responder a las preguntas de los senadores sin acogerse a su derecho a no contestar, a diferencia de otros que han comparecido anteriormente, como Ábalos y Cerdán.

Se prevé que el interrogatorio se extienda durante varias horas, y el presidente lo afronta con una actitud serena, similar a la que exhibe durante las sesiones de control en el Congreso, aunque con un matiz de mayor intensidad, según su equipo. Sin embargo, se espera que no revele datos significativos ni realice anuncios, manteniendo su perfil institucional como prioridad.

El Gobierno considera que la estructura de turnos de 50 minutos por grupo no beneficia a Sánchez y anticipa que algunos senadores podrían obstaculizar el proceso, restando tiempo valioso para las respuestas del presidente. Ante este escenario, el Ejecutivo no espera salir victorioso de la sesión, sino que su objetivo es "igualar" la situación.

En respuesta a la convocatoria del PP, el Gobierno ha criticado (incluyendo a Feijóo) y ha emitido un mensaje a la oposición para que la comparecencia no se convierta en un espectáculo.

Hasta el momento, el nombre del senador del PP encargado del interrogatorio se mantiene en secreto, lo que ha generado expectación. Sin embargo, desde Moncloa restan importancia a quién será el encargado, asegurando que Sánchez mantendrá la misma postura independientemente de su interlocutor. En cualquier caso, se prepara para una sesión que consideran "dura" y "compleja".