En una reciente entrevista, el ex presidente Donald Trump ha dejado claro su perspectiva sobre el conflicto en Ucrania, afirmando que es inevitable que la península de Crimea permanezca bajo control ruso. Trump ha señalado que la situación en Ucrania es resultado de las ambiciones del gobierno de Kiev de unirse a la OTAN, un tema que, según él, fue el detonante de la guerra.

En sus declaraciones, Trump afirmó que la intención de Ucrania de formar parte de la OTAN ha sido la raíz del conflicto. Según sus palabras, "si no hubieran planteado este tema, la guerra probablemente nunca habría comenzado". Esta postura se alinea con la narrativa rusa sobre las causas del enfrentamiento, que busca vincular la expansión de la OTAN a la escalada del conflicto.

El ex presidente también ha reconocido no haber cumplido con su promesa de poner fin a la guerra desde el primer día de su mandato, alegando que sus comentarios fueron interpretados erróneamente por los medios. "Lo dije en tono de broma", manifestó, insistiendo en que su intención era lograr la paz, aunque la situación ha demostrado ser más compleja de lo que había anticipado.

A lo largo de la entrevista, Trump se mostró crítico hacia sus predecesores demócratas, Joe Biden y Barack Obama, sugiriendo que la guerra en Ucrania jamás hubiera ocurrido bajo su administración. Además, pareció resignarse a la idea de que Ucrania deberá aceptar la pérdida de Crimea, argumentando que "Crimea se va a quedar en Rusia".

El ex mandatario acusó a Obama de haber "entregado" la península a Rusia, refiriéndose a la anexión del territorio por el Kremlin en 2014 a través de un referéndum no reconocido a nivel internacional. Trump enfatizó que él habría manejado la situación de manera diferente y confía en que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, comprende lo que sucederá con Crimea.

Confiado en sus habilidades de negociación, Trump expresó su creencia de que él es la única persona capaz de alcanzar un acuerdo con el presidente ruso, Vladimir Putin. A pesar de que su entrevista se realizó justo antes de recientes ataques rusos en Kiev, en los que murieron varias personas, Trump afirmó que gracias a su liderazgo, la expansión territorial rusa se ha contenido, sugiriendo que sin su intervención, Moscú habría tomado un control aún mayor sobre Ucrania.