En un contexto desgarrador, el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) anunció recientemente que ha completado la entrega de los cuerpos de todos los rehenes que han podido recuperar. La organización también subrayó la necesidad de contar con un "equipo especializado" para localizar y recuperar a los restantes, los cuales se encuentran atrapados entre los escombros de la devastada Franja de Gaza.

La declaración, emitida por las Brigadas al Qassam, el ala armada de Hamás, se produce en el marco de un acuerdo de alto el fuego negociado con Israel, tras más de dos años de un asedio que ha llevado a la muerte de más de 67.900 palestinos. En su comunicado, Hamás enfatizó la complejidad que implica la búsqueda de los cuerpos restantes, señalando que las tareas de recuperación en áreas gravemente dañadas requieren de recursos humanos y tecnológicos específicos.

Coincidentemente, esta declaración se produce poco después de la entrega de los cuerpos de dos rehenes a un convoy del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). Según el acuerdo establecido la semana pasada, Hamás debía entregar a los 48 rehenes en un plazo de 72 horas desde la entrada en vigor del alto el fuego, un tiempo que concluyó el pasado lunes.

Hasta el momento, el grupo ha liberado a 20 rehenes sanos y ha entregado los restos de siete de los 28 fallecidos, con la posibilidad de que esta cifra aumente a nueve si se confirma la entrega reciente. Sin embargo, incluso el gobierno de Estados Unidos ha coincidido en que Hamás requerirá más tiempo para localizar a los restantes.

Por su parte, la operación militar israelí, que comenzó tras los eventos del 7 de octubre, ha generado un saldo aterrador de más de 67.900 muertes y 170.000 heridos, según cifras proporcionadas por las autoridades de Gaza. A pesar de la magnitud de la crisis humanitaria, se temen que las cifras sean aún más alarmantes, ya que continúan surgiendo nuevos hallazgos de cadáveres en áreas de Gaza de las que las fuerzas israelíes se han retirado recientemente.