En un nuevo y triste episodio de la tragedia de la migración, la Guardia Costera de Túnez ha confirmado que han sido recuperados los cuerpos sin vida de 31 migrantes que se ahogaron después de un naufragio frente a las costas del país mientras intentaban llegar a Europa.

Según fuentes cercanas al asunto y citadas por el diario 'Nessma', los cuerpos fueron encontrados cerca de las ciudades de Sfax, Mahdia y la isla de Kerkenna.

Reportes preliminares indican que la mayoría de los fallecidos proceden de países del África subsahariana, y entre ellos hay, al menos, dos menores. Los cuerpos han sido entregados a los médicos forenses con el objetivo de identificar a las víctimas.

Este último desastre humano se produce después de que la Guardia Costera informara a principios de abril que más de 14.000 migrantes habían sido detenidos tratando de llegar a Europa a lo largo de 2021. Diariamente, hay cientos de migrantes provenientes del África subsahariana que intentan cruzar en barco desde Túnez y Libia hacia Italia, pero muchos pierden la vida en el intento.

La situación de la migración se ha convertido en un grave problema social y humanitario para el mundo entero. Es necesario abordar el problema desde una perspectiva global y humanitaria, en lugar de cerrar las puertas a aquellos que buscan simplemente una vida mejor para ellos y sus familias.