En un contundente discurso en Puente Genil, la ministra de Hacienda y vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, arremetió contra la gestión del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, acusándolo de desviar recursos esenciales para combatir la pobreza en la comunidad, un problema que sigue afectando a un gran número de ciudadanos, incluyendo un alarmante índice de pobreza infantil.

Durante su intervención en la apertura del Congreso Provincial del PSOE en Córdoba, Montero hizo un llamado al Partido Popular a posicionarse firmemente en defensa de los intereses del país, en lugar de aliarse con Vox, un partido que, según ella, fomenta políticas que perjudican a la sociedad española en su conjunto. La ministra instó al PP a que se una a los esfuerzos del Gobierno socialista liderado por Pedro Sánchez, quien ha destinado una inversión significativa de 14.000 millones de euros para respaldar el empleo y a los empresarios ante la crisis causada por las nuevas tarifas impuestas por Estados Unidos a las exportaciones europeas.

Reiteró la necesidad de que el PP actúe de manera constructiva en estos momentos de dificultad, subrayando que todos los partidos políticos deben colaborar en la aprobación de medidas que protejan el tejido productivo del país. "El momento es ahora, no podemos permitir que la historia nos juzgue por la inacción", enfatizó Montero, al tiempo que destacaba el compromiso de los socialistas por anticiparse a situaciones de crisis y evitar que se produzcan cierres empresariales o pérdidas de empleo.

En un mensaje dirigido específicamente a Moreno, Montero recordó que gobernar implica un cambio real en la vida de las personas, lo que requiere visión y proyectos ambiciosos. Criticó al Gobierno andaluz por su falta de políticas efectivas en educación y su decisión de recortar fondos destinados a programas que benefician a las familias más vulnerables. La ministra también condenó la eliminación de iniciativas que apoyaban la educación infantil, asegurando que esto solo perpetúa la desigualdad en la comunidad.

Defendiendo el valor de una educación pública de calidad, Montero expresó la preocupación del Gobierno por la proliferación de "universidades low cost", que comprometen la calidad educativa en favor de recortes presupuestarios y estándares académicos más bajos. Resaltó que la formación adecuada es esencial para que las futuras generaciones puedan acceder a mejores oportunidades y contribuir al desarrollo del país.

Remarcó que, mientras el PSOE continúa esforzándose por garantizar una educación accesible y equitativa, el Gobierno andaluz ha hecho caso omiso a las necesidades reales de los ciudadanos, especialmente en lo relacionado con el derecho a una vivienda digna. Montero subrayó que no existe un plan efectivo en Andalucía que aborde las dificultades que enfrentan los jóvenes y las familias vulnerables para encontrar alquileres asequibles.

La vicepresidenta concluyó su intervención destacando la necesidad de un "nuevo andalucismo", un enfoque que esté alineado con la defensa activa de los derechos de las mujeres y que priorice el talento y las necesidades reales de Andalucía. Montero citó a Carmen Calvo como un ejemplo a seguir en la lucha por la equidad de género, afirmando que las mujeres tienen todo el derecho a ser escuchadas y protegidas.

Finalmente, Montero subrayó el compromiso del PSOE con un cambio positivo y convincente para Andalucía. Afirmó que, con una dirección unitaria y fuerte, el PSOE es imbatible, y lanzó un mensaje claro al presidente Moreno, indicando que su nerviosismo no proviene de su liderazgo, sino del conocimiento de que un PSOE unido es una formidable fuerza para el cambio.