El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha elevado la presión sobre Rusia en un discurso reciente en la ONU, advirtiendo sobre la posibilidad de implementar aranceles "altamente severos" si el país no se sumerge en negociaciones para alcanzar la paz. En su intervención, instó a Europa a cortar la dependencia energética de Rusia, señalando que esa conexión compromete su apoyo activo a Ucrania en el conflicto en curso.
Durante su discurso, Trump comentó que la reciente decisión de varios países de reconocer el Estado palestino es una "recompensa" a los grupos extremistas, resonando así con los puntos de vista del gobierno israelí liderado por Benjamin Netanyahu. Afirmó que la comunidad internacional debe enfatizar la liberación de los rehenes tomados por Hamás en lugar de ceder a sus exigencias.
Trump, que se mostró "comprometido" con las negociaciones para un alto el fuego en Gaza, no dudó en criticar a Hamás por negarse a firmar acuerdos, apuntando que estos obstáculos han entorpecido sus esfuerzos diplomáticos desde que asumió el cargo. Asimismo, se refirió al conflicto en Ucrania, sugiriendo que, en su perspectiva, la resolución debería haber sido rápida y, sin embargo, responsabilizó a Rusia por prolongar la guerra.
En su intervención, el presidente advirtió que Estados Unidos está preparado para actuar enérgicamente contra aquellos países que, como China e India, continúan apoyando a Rusia durante este conflicto. Trump dejó claro que, si las negociaciones no progresan, se podrían implementar medidas arancelarias contundentes que requerirían la cooperación activa de las naciones europeas.
El presidente también reprimió la falta de acción de Europa, destacando que continúa importando energía rusa a pesar de sus comprometidos esfuerzos para apoyar a Ucrania. "Es desconcertante que sigan comprando petróleo y gas mientras afirman estar del lado ucraniano", dijo, añadiendo que es crucial que Europa detenga esa compra inmediatamente para evitar un desperdicio de tiempo.
En su discurso, también abordó el tráfico de drogas, centrándose en las operaciones que, según él, se originan en Venezuela, y reafirmó su intención de designar cárteles de drogas como organizaciones terroristas. Su propuesta incluye un uso más agresivo del poder militar estadounidense para erradicar estas organizaciones delictivas, declarando que cualquier grupo que busque introducir drogas en el país enfrentará severas repercusiones.
Al reflexionar sobre el estatus global de Estados Unidos, Trump subrayó que el país ha logrado cambiar de ser objeto de burla a ser un líder respetado en el escenario internacional. Aseguró también que todos los países de la OTAN han fijado acuerdos para aumentar su gasto en defensa, criticando a la anterior administración por lo que consideró "debilidad".
Por otro lado, Trump defendió la necesidad de adoptar políticas migratorias más restrictivas, enfatizando que quienes ingresen a Estados Unidos de manera ilegal enfrentarán consecuencias severas. Dirigiéndose a Europa, expresó su preocupación por lo que consideró una ola de inmigración indeseada, ligando el fenómeno a cuestiones de seguridad.
Finalmente, el presidente arremetió contra la ONU, que considera responsable por la actual "crisis migratoria", sugiriendo que la organización no solo falla en resolver problemas, sino que a menudo crea nuevos desafíos. Durante su discurso, Trump también prometió promover un método de verificación global para hacer frente a las amenazas biológicas, apoyándose en tecnología de Inteligencia Artificial para lograr una coordinación más efectiva entre los países en este ámbito.
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.