En un desarrollo alarmante desde la Casa Blanca, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha confirmado que ha dado luz verde a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) para llevar a cabo actividades encubiertas en Venezuela. Este anuncio se produce en medio de un incremento de las tensiones regionales tras los recientes bombardeos estadounidenses en el Caribe, en los que se justifica una supuesta lucha contra los cárteles de la droga.

Durante una rueda de prensa, Trump se refirió a informes del diario 'The New York Times', afirmando que su autorización se basa en "dos razones" críticas. Según él, un gran número de individuos, muchos de los cuales serían criminales, han cruzado la frontera, además de que se ha detectado un considerable flujo de drogas provenientes de Venezuela hacia Estados Unidos.

El presidente aseveró que el contrabando de drogas desde Venezuela se realiza principalmente por mar, aunque también se están preparando para interceptar operaciones en tierra. "Venezuela está sintiendo presión", manifestó, añadiendo que actualmente mantienen el control de las aguas circundantes. "No hay nadie. Estamos vigilando", insistió sobre la situación en el mar, mientras eludía las crecientes preocupaciones acerca de un posible incremento de las acciones militares por tierra.

Trump celebró que, gracias a recientes ofensivas, no han tenido avistamientos de embarcaciones, restando importancia a la controversia que rodea la destrucción de supuestas narcolanchas y la pérdida de vidas en estos ataques. El presidente afirmó que "salvar 25.000 estadounidenses" es la justificación para tales acciones, un argumento que ha desatado críticas tanto a nivel nacional como internacional.

Por su parte, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha respondido a las provocaciones de Trump firmando un decreto que establece un estado de conmoción externa. Esta medida busca preparar al país para una posible agresión externa, una preocupación creciente en Caracas ante las declaraciones beligerantes de funcionarios estadounidenses en los últimos días.