En medio de la intensa oleada de ataques aéreos por parte del Ejército de Israel contra la capital de Líbano, Beirut, el partido-milicia chií libanés Hezbolá ha confirmado la muerte de Ibrahim Mohamad Kobeisi, jefe de la unidad de misiles de su rama militar. Hasta el momento, se contabilizan cerca de 570 muertos y más de 1.800 heridos como resultado de estos bombardeos selectivos.

En un comunicado difundido por la cadena de televisión Al Manar, afín al grupo islamista, Hezbolá lamenta la pérdida del líder Ibrahim Mohamad Kobeisi, conocido como 'Hajj Abú Musa'. Originario del pueblo de Zebdine, en el sur de Líbano, Kobeisi era considerado el principal objetivo del ataque y estaba al mando de varias unidades de Hezbolá, incluida la rama de misiles de precisión.

Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron la eliminación de Kobeisi, quien había sido responsable de los lanzamientos de misiles contra posiciones israelíes. Este miembro de Hezbolá, que se unió al grupo en los años 80, ocupaba puestos militares clave y se encontraba cerca de los altos mandos de la organización.

La escalada de enfrentamientos ha llevado a numerosos ataques contra posiciones de Hezbolá en el sur y en el este de Líbano, con el grupo islamista respondiendo con el lanzamiento de cohetes contra territorio israelí. La tensión ha aumentado en los últimos días tras una serie de explosiones que afectaron dispositivos de comunicación vinculados a Hezbolá, provocando críticas internacionales por su impacto indiscriminado.

Las hostilidades se intensificaron luego de los ataques lanzados por Hamás y otras facciones palestinas contra Israel el 7 de octubre, resultando en una campaña militar por parte del ejército israelí con un saldo de más de 41.400 muertos en Gaza, así como centenares de fallecidos en Cisjordania y Jerusalén Este. La denominada 'Inundación de Al Aqsa' por Hamás y sus aliados desencadenó también enfrentamientos en la frontera entre Israel y Líbano, junto con acciones de milicias proiraníes de Irak y hutíes en Yemen.