El portavoz y miembro del buró político del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), Osama Hamdan, ha denunciado este jueves la incertidumbre que rodea la situación de los rehenes en la Franja de Gaza tras los ataques del 7 de octubre. Durante una entrevista con la cadena de televisión CNN, Hamdan afirmó que "nadie tiene idea" de cuántos rehenes siguen con vida de los más de cien que fueron secuestrados por milicias palestinas.

En un intento de rescatar a cuatro rehenes, Israel llevó a cabo una operación en el campo de refugiados de Nuseirat que resultó en la muerte de más de 270 palestinos, incluyendo tres secuestrados, según Hamdan. Además, en abril, durante negociaciones para un alto el fuego, Hamás admitió su incapacidad para liberar a 40 mujeres y ancianos enfermos exigidos por Israel en la primera etapa del acuerdo.

Hamdan insistió en que Hamás requiere una confirmación clara de que Israel aceptará las demandas de un alto el fuego permanente, incluyendo una retirada total de Gaza, la autodeterminación palestina, la reconstrucción de la Franja y el fin del bloqueo. Acusó al Gobierno israelí de buscar una tregua temporal de seis semanas para luego reanudar los combates tras liberar a los rehenes.

En respuesta a informes de abusos físicos y mentales a rehenes liberados, Hamdan atribuyó estos problemas a los bombardeos israelíes en Gaza. Argumentó que las atrocidades vistas en la liberación de rehenes fueron provocadas por las acciones de Israel en la región.

El representante de Hamás defendió los ataques del 7 de octubre como una reacción legítima contra la ocupación israelí del territorio palestino. Responsabilizó a Israel de la violencia y la falta de alternativas para los palestinos. Además, negó informes que atribuían al líder de Hamás en Gaza, Yahya Sinwar, comentarios justificando la muerte de miles de palestinos como "sacrificios necesarios".

En última instancia, Hamdan desmintió supuestos mensajes de Sinwar difundidos en medios, afirmando que fueron fabricados para desacreditar al líder palestino. Enfáticamente, afirmó que nadie puede aceptar la muerte de palestinos y la presión contra Hamás para dividir a su pueblo.